BALTASAR: ¡Dios vos salve, señor!; ¿sodes vos estrellero? Decidme la verdad, de vos saberlo quiero. GASPAR: ¿Vedes tal maravilla? Nacida es una estrella. MELCHOR: Nacido es el Criador, que de las gentes es señor. Auto de los Reyes Magos
En algún momento he tenido que explicarle a una persona que consulta su carta astral, en qué consiste vivir una epifanía astrológica. Se trata de un momento en el que se da un tránsito astrológico que produce una manifestación en la vida de una persona que es reveladora y suele cambiar su vida, pues es algo realmente valioso que se le acaba de manifestar.
Como todos los años en este día mágico, como lo es el día de Reyes, siempre traemos por nuestro rincón un artículo homenaje a los santos patronos de los astrólogos: los Reyes Magos de Oriente.
Si es la primera vez que vienes al rincón estrellero, puede que te interese leer los artículos previos sobre estos entrañables personajes bíblicos, que tanta ilusión nos hacen, a los niños, a y los que no lo somos ya. (Basta con buscar en las etiquetas de Reyes Magos y ahí contamos su historia y demás datos de interés desde que se fundó este blog).
El día 6 de enero se conoce como la Epifanía del Señor, en referencia a cuando Jesucristo se manifiesta en la Tierra como Dios hecho hombre. La palabra griega "epiphanós" significa literalmente "darse a conocer, manifestarse". Aunque la fecha oficial de su llegada al mundo se celebra un 25 de diciembre, según la leyenda, los magos, aquellos sabios de Oriente, aparecieron en la ciudad de Belén 12 días más tarde de la Natividad, el día del nacimiento, ¡y qué nacimiento!.
La señal que apareció en el cielo que fue la que guio a los sabios, fue una estrella, la famosa estrella de Belén de la que tanto hemos hablado en el blog, que les indicó el lugar exacto del nacimiento del Rey de Reyes. La famosa estrella de Belén bien pudo ser la mega conjunción en Piscis de Saturno-Júpiter-Venus-Luna-Sol, una maravilla celestial que marcó el inicio de una nueva era. Y que es la imagen de cabecera de este nuestro blog.
Qué fascinantes son los Tres Reyes Magos. En otros idiomas como el inglés, se les conoce como "the Three Wise Men" (los tres sabios) y en Alemania se va más allá: "Heilige Drei Könige", que viene a ser "los Santos Tres Reyes", porque tienen categoría de santos, y no es tontería: fueron los primeros paganos de la Historia que se postraron ante Jesucristo, cuando este era tan sólo un niño recién nacido, cuando nadie sabía (sólo los sabios), cuál era la misión que iba a realizar aquel niño cuando fuese un hombre.
"Magós" era la palabra griega para designar a una persona llena de sabiduría, que significaba "maestro, sabio", en alusión a la posible procedencia de los míticos Melchor, Gaspar y Baltasar, sobre una posible vinculación a la casta sacerdotal persa de la época, que rendía entonces culto a un precursor del cristianismo en Oriente, en el imperio persa, la actual Irán, como lo era el Zoroastrismo, una religión que tiene muchos elementos comunes con la religión judeocristiana. Y la casta sacerdotal de la misma, realizaba una práctica, como lo es el estudio de los astros, por ello es normal que incluso en las misas cristianas católicas del día de la Epifanía, muchos sacerdotes mencionen la posibilidad, de que los Reyes Magos fueran astrólogos, porque para seguir a una estrella, desde luego hace falta conocerlas.
Viajemos en el tiempo 2022 años hacia atrás, imaginemos a estos tres hombres (aunque nunca se dijo que fueran tres, pero nos gusta creer que sí, porque nos encanta su leyenda) estudiando los astros y las escrituras sagradas llenas de profecías, entre las cuales, estaba aquella que predecía un nacimiento que cambiaría la historia de la Humanidad. El nacimiento de un misterioso niño, que venía a salvar al mundo. Los profetas como Isaías, Jeremías, Miqueas, y la famosa profecía de Balaam, anunciaban esta gesta que estaba por venir, y sería una señal en el cielo la que marcaría tamaño evento.
Imaginemos a esos tres hombres, en pleno estudio y descubriendo esta maravilla, marcada por una estrella. No se quedaron quietos y decidieron abandonar sus lugares de origen, en un Oriente muy lejano, para viajar por tierras incluso inhóspitas, y hacer miles de kilómetros hasta dar con esa señal que les indicaba el lugar del nacimiento del gran rey que estaba por nacer. Se tiene que tener muy claro que algo maravilloso va a suceder para coger y dejarlo todo, sus casas, a sus familias, sus tierras, y emprender esta gesta, para llegar lejos sin saber exactamente a dónde, porque no sabían el lugar exacto, hasta que apareciera esa señal en el cielo que les indicara dónde tendría lugar la gran maravilla.
Y en medio del viaje, ahí aparece la señal celeste que les indica dónde ha nacido el Cristo que va a cambiar el mundo y la Historia para siempre. Y fue una estrella. A ese fantástico hallazgo es a lo que se conoce como la Epifanía: la manifestación de Dios en la Tierra, apareciendo en el cielo.
Tener una epifanía es encontrar una grandísima manifestación, es dar con la respuesta necesaria que nos lleva a descubrir un hallazgo que nos despeja toda dudas, hemos dado con todo un descubrimiento, y esto, también se refleja astrológicamente en el cielo.
Tal vez a lo largo de vuestras vidas habéis vivido un momento así, el momento revelador. ¿Y cómo descubrimos en nuestras cartas natales que estamos viviendo una experiencia así?.
Aspectos astrológicos de la Epifanía
La Epifanía es la gran revelación. Y se manifiesta de muchas formas, a través de estrellas claro, y vamos a ver cuáles son esas estrellas que nos están mostrando una manifestación en nuestras vidas.
Urano es un planeta que entra de golpe y allá lo que toca suele poner patas arriba, pero poco se comenta que este planeta, con los sustos que da a veces, y las sorpresas no muy bienvenidas que nos da en otras ocasiones, es un planeta vinculado a las grandes revelaciones que nos despiertan de golpe. Un tránsito de Urano hacia la Luna es uno de los famosos aspectos que nos traen una respuesta, y se experimenta de golpe, y se vive primero desde la convulsión de las emociones, no sin nervios, pero se halla el fogonazo mental que hacía falta para resolver el misterio y disipar las dudas. Urano hacia Mercurio lo que hace es despertar la mente de golpe, estás tan tranquilo y aparece la explosión en la mente que indica hallazgo, descubrimiento, y es de golpe, muy revelador este aspecto, es como estar leyendo un libro y en un par de líneas aparece el mensaje que te va a cambiar la vida para siempre.
Urano tiene otro potente detonador de epifanías, como lo es su unión hacia Plutón, o cuando transita al Plutón natal de la carta astral. Este aspecto funciona como cuando algo incómodo recorre tu cuerpo, sabes que algo pasa, no lo identificas pero es una sensación que te está diciendo que algo va a resurgir y no esperas qué es. Como si de repente te diera por cavar un hoyo para plantar una planta, descubres enterrado un cofre lleno de respuestas que te cambiarán la vida, porque te harán descubrir algo que estaba enterrado, ni sabías qué era ni quién lo dejó ahí, pero estaba oculto para que algún día tú lo descubrieras. Y el contenido del cofre tiene cosas que te pueden dejar de piedra, pero han venido a solucionar tu vida, no sin antes agitarla, porque Plutón es así, algo bestia en su forma de proceder. Es este un poderoso aspecto astrológico que si encima toca a la Luna o al Sol, hace que el cofre salga a la superficie de repente, la misma tierra se abre a lo bestia y ahí está tu revelación. No se dice que sea agradable, porque no se espera que suceda algo así, y a lo mejor el contenido del cofre no es lo que te gustaría ver en ese momento, el literalmente, como si desenterraran a un muerto, pero que trae una información que necesitas urgentemente saber en ese momento de tu vida. Pasarás los días algo inquieto, incluso con malestar, no esperabas algo así, pero es necesario que suceda, porque algo en tu vida debes solucionar y esa epifanía es tu respuesta.
El bueno de Júpiter es otro encargado de traes bonitas epifanías, su forma de actuar es diferente, de buen rollo, magnánimo, generoso, a nadie le amarga un caramelo llamado Júpiter. Uno de los aspectos que más gustan de Júpiter cuando trae bonitos mensajes del cielo, es la posición hacia Urano, eso es una revelación bonita, muy bonita, que indica el descubrimiento de una verdad necesaria que debemos saber, pero no se sufre un trance convulso en el proceso, como se puede tener con Urano y Plutón. Se tiene un impacto psicológico bajo este tránsito, pero es bueno, es revelador y nos ayuda a descubrir algo positivo que necesitamos descubrir. Además suele tener grandes cambios que alteran la vida, y generalmente son para bien, por nuestro bien y con el fin de que seamos felices.
Júpiter, asociado al cachondeo, a la fiesta y la alegría, tiene una faceta de la que se habla poco, y es la de su lado místico religioso, que se incrementa considerablemente cuando se une a Neptuno. Aquí la revelación que experimenta una persona torna a una experiencia mística incluso aunque no se sea una persona religiosa o se posea la mentalidad más práctica y lógica del mundo. Si se es religioso (da igual el creo o religión de la persona) entonces la experiencia va a alcanzar cotas tremendas de conexión celestial. Una unión de Júpiter-Neptuno y Venus, vendría a ser el éxtasis místico que experimentaba Santa Teresa de Ávila, que vivía prodigiosas visiones en trance aunque su cuerpo estaba en una calma total, que la transportaban a otro mundo. Bajo una posición así nuestra faceta espiritual se ensancha y nos completa, es estar lleno de un espíritu místico y muy trascendental; las personas que rezan mucho, o que sus vidas están vinculadas a la religión, como sacerdotes, monjes y monjas (sean orientales u occidentales), personas que tienen devoción, aquellas que sienten un poder especial con Dios, pueden experimentar visiones, mensajes claros, manifestaciones increíbles, y les pasa en solitario, cuando están solos, no lo ve nadie, pero sólo lo ven ellos, y es algo que cambia la vida de muchos.
Un particular dato con Júpiter hacia Neptuno, es que la persona va a experimentar un momento de su vida en el que se le va a mostrar un mensaje del cielo que le está indicando un despertar con respecto a una situación de su vida que no iba por el camino correcto, y la persona en vez de tomárselo mal, lo que hace es con ese espíritu magnánimo de Júpiter, dar gracias por haber experimentado esa sensación ya que ha descubierto algo necesario sobre su existencia. Es común vivir un tránsito así cuando se tiene un sueño en la mente que se sueña con alcanzar, pero no es real, y la persona que va a experimentar el tránsito, recibe el mensaje de que perseguir el sueño es una quimera, porque su camino no va por esa dirección, ya que lo que le espera es otra cosa, muchísimo mejor, que es lo que le va a hacer feliz de verdad. En vez de tomárselo mal, la persona recibe incluso un alivio en su vida que le deja con una inmensa paz, porque ha hallado la respuesta necesaria. El mensaje es satisfactorio, bonito, se vive una inmensa calma interior, se está en paz con la vida y el universo. Aquí se suelen abrir capítulos de la vida que son nuevos, llenos de esperanza.
Es esta posición una de las más bonitas en cuanto a revelaciones se refiere, y por cierto, tendremos una en abril de este 2022 que acaba de empezar. ¿Qué mensaje se nos mostrará?.
Otra posición muy vinculada a las grandes epifanías es la unión de Júpiter con Saturno. En el año 2020 durante el mismo día del solsticio de invierno, tuvimos una exacta en Acuario, de hecho se debatió la posibilidad de que fuera una versión 2.0 de la mítica estrella de Belén. Aquí la revelación consiste en darse cuenta de una realidad de la vida que al principio puede ser algo dolorosa, pero es necesario conocerla y después con disciplina y sentido de la realidad, tras haber descubierto esa verdad, se actúa en consecuencia, con madurez. Puede parecer no tan "mágica" como las otras anteriores de Júpiter, pero es una percepción erróena: es una conjunción muy bonita que significa hallar las claves para superar las barreras de la vida, conocer los obstáculos que están en el camino, y sobreponernos a ellos. Trae oportunidades muy buenas de crecimiento personal, también se vincula a hallazgos que se remontan a un tiempo atrás, donde se quedaron las cosas paralizadas, y ahora es cuando por fin algo empieza a moverse porque se ha descubierto qué era lo que impedía el avance. Bajo esta posición, la persona se da cuenta de repente de que algo en su vida debe cambiar, y lo empieza a poner en práctica. Aunque se tiende a mirar a Saturno con recelo, por sus imposiciones y trabajo por hacer, es una fantástica posición reveladora que trae suerte súbita, cuando menos se lo espera, y solemos pensar que eso de irrumpir de golpe es cosa de Urano, pues Saturno nos puede sorprender para bien cuando se une a Júpiter como en esta conjunción. Es tan buena esta posición, que hasta cuando en un momento de la vida dado se viva bajo restricciones o alguna imposición, la persona que es afortunada de recibirla con buenos aspectos en la carta natal, no se sentirá restringido u oprimido, porque esta posición actúa muy en conexión con el espíritu y en interior de la persona. Como en el solsticio de invierno del aciago 2020, que tuvo lugar esta conjunción, hubieron muchos que a pesar de cómo estaba el patio, no experimentaron sentirse restringidos por las normas o por los cambios gordos a los que nos teníamos que enfrentar por la situación de aquel año, porque va mucho con el interior de la persona, que se va a reflejar fuera.
Si a todos estos aspectos tanto de Urano, Júpiter y Saturno, les añadimos aspectos a la Luna y Sol, la epifanía será más intensa, más espectacular y mucho más marcada para la persona que la está experimentando.
No sólo son posiciones astrológicas que se manifiestan a un individuo, sino que estos tránsitos astrológicos influyen a nivel mundial y social, y una gran revelación se produce que cambia la Historia, se manifiesta algo que es de suma importancia para el mundo. Puede ser un descubrimiento científico, o el hallazgo de tesoros ocultos, avances y grandes hallazgos que vienen del pasado y son importantes para el futuro de la humanidad.
Esta noche, si el cielo os lo permite, mirad hacia el este a partir de las 19:00 horas de la tarde, si estáis en el hemisferio norte, los amigos del hemisferio sur la pondrán ver poco antes del amanecer. Ahí están esos tres sabios que un día lo dejaron todo para vivir la gran manifestación, la gran epifanía, y no se lo esperaban. Se encuentran en el cinturón de la constelación de Orión.
¿No crees en los Reyes Magos porque piensas que eso es una leyenda para niños?. No pueden ser sólo fruto de una leyenda ficticia, cuando en la Biblia ya los mencionan, y nos seguimos acordando de ellos después de 2022 años. Después de visitar al Niño de Belén se fueron por otro camino para evitar a Herodes, y se dice que no se sabe dónde fueron a parar. Claro que lo sabemos: están en el cielo, y se dejan ver durante todo el año.
Baltasar: Dios vos salve, Señor, ¿sodes vos estrellero?, decidme la verdad, de vos saberlo quiero. Gaspar: ¿Vedes tal maravilla?, nacida es una Estrella. Melchor: Nacido es el Creador que de las gentes es Señor.
-Auto de los Reyes Magos-
Como todos los años por la fiesta de Reyes, en este blog se publica un artículo relacionado con Sus Majestades de Oriente, ya que dentro de la Astrología, se les tiene un gran respeto. Y en el mundo cristiano y en los países en los que se celebra su fiesta (España como uno de ellos donde la fiesta es importante), se les quiere mucho, se les espera con ilusión, y no sólo por los niños, sino por los mayores, siendo ya desde la víspera una noche que se siente mágica.
Desde el comienzo de este blog hay un espacio reservado para ellos, la foto principal de nuestro blog es la de la posible Estrella de Belén que los sabios de Oriente pudieron haber visto en su camino hacia Belén, para poder conocer y adorar al que desde tiempos primitivos y como decían las Escrituras, estaba llamado a ser el Mesías, el Rey de los Judíos, Jesús de Nazaret. Esa "Estrella de Belén" entra dentro de las probabilidades de ser la Gran Conjunción que tuvo lugar en Piscis entre el Sol, la Luna, Júpiter, Saturno y Venus en el signo de Piscis, allá por el 6. A.C. Esta teoría estaba apoyada por el gran astrónomo Johannes Kepler, que publicó allá por el 1607.
En este blog tenemos artículos relacionados, todos publicados en la fiesta de Reyes a lo largo de la historia de este blog, que recogen información variada sobre estos queridos y enigmáticos personajes. Desde el origen de sus nombres, la información en los evangelios, su vinculación con la astrología, su origen y procedencia, investigaciones históricas recogidas, la ubicación de sus tumbas en la catedral de Colonia, Alemania, porque existe una tumba de los Magos de Oriente y el Papa Juan Pablo II oró ante la misma en su visita a la ciudad; no es el único Papa que ha tenido su admiración y respeto ante la figura de los Magos, el propio Benedicto XVI publicó una obra sobre la Infancia de Jesús, y ubicó a nuestros queridos Reyes Magos en Andalucía como tierra de origen (quién sabe, quizás Tartessos, actual Doñana). Por si tenéis interés, aquí está toda la información al respecto de nuestros reyes predilectos:
Es tal su vinculación con la astrología, que el 6 de enero se celebra el Día del Astrólogo en su honor, aunque el día mundial de la astrología sea el día del equinoccio de primavera, se celebra este día el arte de la astrología, pero la figura del astrólogo, es para el Día de Reyes, en la Epifanía del 6 de enero.
De los Reyes Magos corren un sinfín de leyendas, sólo aparecen en el evangelio de Mateo en el capítulo 2 del versículo 1 al 12, y como siempre se ha indicado en este blog, partiendo de la información recogida sobre ellos, en ningún momento del evangelio se dice ni que fueran tres ni que se llamaran Melchor, Gaspar y Baltasar, ni tampoco que fueran reyes, en el sentido de ser gobernantes de algún lugar de aquellos tiempos. Se les atribuye este número por ser tres los regalos que le ofrecieron al Niño Jesús recién nacido: oro (como condición real del Niño), incienso (su condición divina) y mirra (la parte mortal de Jesús que sería su destino en la Cruz, con la mirra se embalsamaban cadáveres de personas relevantes en aquellos tiempos en Israel). En el evangelio de Mateo se les denomina "magos" por la palabra griega "magós" que significaba "sabios" o "maestros"; dando a entender, que eran hombres sabios, que sabían de algún conocimiento, quizás sacerdotes de alguna casta espiritual del Oriente, pero no se indican que fueran gobernantes de ningún sitio, sólo "sabios". Y para partir desde algún punto del Oriente hacia Belén, siguiendo una estrella, porque eso sí que lo menciona el evangelio de Mateo, hay que saber de estrellas y constelaciones, ya que en esos tiempos (y se sigue haciendo hoy día por mucho GPS que tengamos), los viajeros y navegantes seguían las estrellas del cielo para guiarse. Por ello a los Reyes Magos, aquellos sabios, se les suele atribuir que podrían ser astrólogos y tener conocimiento del cielo para poder interpretar qué quería decir la estrella, dónde les llevaba, qué significa esa estrella y qué era lo que tenía prometido.
Uno no coge y se pone a viajar sin más desde lejos siguiendo una estrella si no sabe qué implica la misma, y se sabe que la Estrella de Belén les guió hasta el lugar donde había nacido el Niño, aunque es posible que no llegaran esa misma noche del nacimiento de Jesús, sino semanas más tarde, unos dicen que doce días después del Natividad, otros dicen que meses, y otros dicen que por lo menos dos años.
La tradición es la tradición y nos gusta ver en un Belén ese pesebre con María, José y el Niño Jesús rodeados de los Tres Reyes Magos adorando al niño, con el buey, la mula y unos cuantos pastorcitos aparte de los ángeles, que fueron los que anunciaron esa noticia. Y esa tradición de siglos ya, nos encanta, en la cual son tres reyes y se llaman Melchor, el anciano del grupo y de pelo canoso que representa a Europa, Gaspar, el pelirrojo que representa a Asia, y Baltasar, el negro que representa la juventud del hombre y a los pueblos africanos.
Y nos sigue encantando pensar en esa idea de que la noche del 5 al 6 de enero, aparezcan con sus camellos dejando regalos en nuestra casa, o levantarnos la mañana del 6 de enero con ilusión por si ha caído algo, da igual la edad que se tenga, los Reyes Magos son los Reyes Magos; a muchos la Navidad no les gusta, no la celebran, porque se puede o no se puede creer ni tener sentimiento religioso, pero los Reyes Magos son los Reyes Magos, ¿verdad?. Usted puede tener más de 40 años pero se come el roscón le guste o no la Navidad, y se va a ver una buena cabalgata porque los Reyes Magos son los Reyes Magos, son mágicos, no hay más.
¿Has mirado por la ventana durante la Noche de Reyes, aunque sea sólo antes de acostarte?. Mira arriba, más arriba, en el cielo, porque los Reyes Magos, están ahí, y los puedes identificar.
La Constelación de Orión
El Sol cuando llega el solsticio del invierno, normalmente el día 21 de diciembre, se muere. Tal cual, se queda quieto por tres días, y llega el día 25 de diciembre, tres días después, y empieza a levantarse, ya la luz empieza a durar y los días se alargan. Después de tres días muerto, el Sol resucita, ¿os suena esta historia?. Y desde tiempo antiguo se decía, que ese Sol "renacido", lo hacía delante de Tres Reyes, que no eran otros que la intrigante e hipnótica constelación de Orión. Desde tiempos muy antiguos, ya estando el cristianismo asentado, se decía que las tres estrellas del Cinturón de Orión son los Reyes Magos, aunque ya desde tiempos muy muy antiguos, los tiempos del Antiguo Egipto o en la cultura celta, la constelación de Orión ha sido importante (Stonehenge por ejemplo) y se le ha atribuido una condición real.
En nuestra cultura mediterránea de religión judeocristiana (escribiendo desde España para todo el planeta), se atribuye el Sol como un símbolo de Jesucristo y a la constelación de Orión como los Tres Reyes, el Sol "muerto" en el solsticio de invierno nace tres días después delante de Tres Reyes, como si fuera una representación celestial de lo que pasó en la Belén de Judá allá aproximadamente en el siglo 6 A.C ¿Cuáles son las estrellas del Cinturón de Orión que representan a los Reyes Magos?.
A la constelación de Orión se le llama Orión el Cazador, que lleva el atuendo propio de un cazador y justo en su cinturón se sitúan las tres estrellas que tanto llaman la atención. Se sitúan bajo la constelación de Tauro, aunque por la precesión de los equinoccios, estas estrellas están en el signo de Géminis. Orión era un gigante cazador que fue creado de un buey por los dioses, Júpiter (Zeus), Neptuno (Poseidón) y Mercurio (Hermes), ante la petición de Ireo, un apicultor que entretuvo a los dioses y éstos les concedieron un deseo. Ireo no tenía hijos, porque no tenía esposa ya que era viudo y era anciano, así que los dioses le dijeron que para crear un hijo, debía matar a un toro y orinar sobre su piel, llevando esto mismo a la sepultura de su difunta esposa. Y de esa peculiar concepción, nació Orión. Orión se convirtió en un gigante cazador, que tenía capacidad de andar sobre las aguas, así como curiosidad, y cierto día se fue a la isla de Quíos, atacó a Mérope, la hija de Enopión, y éste en venganza por haber ultrajado a su hija, le dejó ciego. Un Orión ciego se encontró con Hefesto, dios del fuego, y le aconsejó que para curarse debía ir a Oriente para tal fin; durante el camino, este fanfarrón en sus aventuras, se jacataba de que podría matar a todos los animales de la Tierra, y fue la madre Tierra, alarmada ante tales ofensas, la que mandó a un escorpión para que matara a Orión, y finalmente, éste lo hizo. Ante la muerte de Orión las diosas solicitaron a Zeus-Júpiter que le colocara en un lugar en el cielo, y éste accedió a la petición, pero no sólo colocó a Orión, sino también a Escorpión, y así se terminaron colocando en el firmamento ambas constelaciones, una enfrente de la otra.
En la constelación de Orión hay un montón de estrellas, muchas, siendo las más famosas aquellas que componen el cinturón, de las que hablaremos aquí esta vez, pero están por ejemplo algunas que seguro que os suenan como Betelgeuse, Bellatrix, Rigel, y muchas otras más, pero es el cinturón del gigante cazador, donde están los Tres Reyes Magos.
Estrellas Fijas del Cinturón de Orión
En el uniforme del cazador, en el cinturón, se encuentran esas tres estrellas que representan a los Tres Reyes.
Vamos a empezar, para situarnos, con la que está arriba de las tres. En el 22º22 de Géminis se encuentra Mintaka, en Delta Orionis; es de color blanco y de un violeta pálido que en una noche limpia se distingue este brillo, su nombre en árabe significa literalmente "cinturón", desde el hemisferior norte se encuentra mirando hacia el sur desde el este y a la derecha, y desde el hemisferio sur, se encuentra mirando al norte y se ven desde la izquierda en el este. De naturaleza saturnal y mercurial, otorga fortuna estando sola. Es una estrella que literalmente, combate con la lengua, con la palabra, esa es su arma, y cuando una persona con esta estrella marcada en su carta, es atacada por alguien a través de la palabra, la persona atacada tiene la creencia que su oponente y agresor, tendrá un castigo que provendrá del cielo, esto es, a esa persona "le traerán carbón".
La segunda estrella, la del medio, es Alnilam, en el 23º28 de Géminis. En ella están la esencia de Júpiter y Saturno, dos pesos pesados, y se vincula con legados y herencia, otorga honores públicos, la fama viene al poco de darse a conocer y suele ser fama duradera, pero en temas amorosos, hace que la persona no sea tan afortunada porque la persona se queda ciega (como Orión) y toma malas decisiones en este terreno; bajo esta estrella, si mal aspectada, se cumple el dicho "el amor es ciego". Es una estrella muy brillante y se le adjudica el ser "la sonrisa de Júpiter y Saturno", pues cuando estos dos planetas trabajan juntos y otorgan favores, otorgan tremendos favores, si esta estrella está bien aspectada, la persona será muy afortunada porque vivirá milagros y recibirá ayuda del cielo. Curiosamente con esta estrella se cumple algo que nos encanta de cara a los Reyes Magos: el que se porta bien obtiene enormes recompensas y regalos. Ya se sabe que Saturno es el que mejores recompensas da, y Júpiter es el benefactor por antonomasia. Le sucede lo mismo que a su compañera Mintaka, que otorga fuerza por la palabra y también si ataca, lo hace a través de la misma, siguiendo la premisa de que aquel que ataca será castigado. Esta estrella conjunta a planetas personales y dependiendo de cómo estén, si en buen estado o no, hará que se obtengan legados buenos, felicidad duradera, honores militares y de estar en mal estado traería peligros en los viajes y pérdidas o problemas con los legados.
La tercera estrella del cinturón, la de abajo, es Anitak, en el 24º41 de Géminis. Está asociada a las espadas, nada es casual, pues es una estrella que engloba la energía de la Luna y Marte, siendo esta combinación tremenda para el combate y la lucha, enérgica, y que da mucho coraje, especialmente para emprenderse en aventuras que suponen empresas peligrosas, imposibles, para esta estrella no hay imposibles, se embarca en un objetivo, y lo cumple con todas las consecuencias. Es muy buena para la investigación detectivesca, descubrir dónde se halla aquello que se busca, la pista clave, le gusta investigar en la oscuridad de la noche. Esta estrella tiene un posible significado que puede ser "joya", "perla". Y aquí tenemos otro rasgo de Rey Mago, que debe buscar en la noche una pista que le lleve a su destino, esa estrella, mientras va cargado con joyas, ¿será el rey portador del oro?.
Las tres estrellas están vinculadas a los viajes largos y especialmente, si éstos tienen un fin religioso, como las peregrinaciones a lugares santos, al igual que los Magos, que desde muy lejos, tuvieron que seguir sus conocimientos en estrellas para ser guiados hasta Belén de Judea, siendo su hazaña la considerada como la primera peregrinación cristiana de la Historia.
Y desde el Oriente, por el Este, en el hemisferio norte, aparecen los Tres Reyes Magos siendo bien visibles, todo el año, pero es mágico de verdad, observar el cielo para verlas en enero, en la noche del 5 al 6, y durante los días posteriores del mes, porque el brillo es especial, parecen mágicas. No son estrellas cualquiera, inspiraron a los antiguos egipcios para construir las famosas pirámides, y también a los celtas de Gran Bretaña para la construcción de Stonehenge, en lo que parece uno de los más antiguos observatorios astronómicos de los que se tenga constancia, aparte de lugar sagrado y ritual.
La Magia de la Constelación de Orión
¿De dónde procede esta fascinación con Orión y por qué se le atribuye una vinculación con lo mágico, diciembre y fenómenos en el cielo?. ¿A partir de cuándo surge y en qué época que muchísimas culturas tienen vinculación a estas estrellas y a un suceso particular que tiene simbología real y hasta sagrada?.
Desde el 24 de diciembre se ve a las tres estrellas del cinturón salir con fuerza y brillo, más brillantes que nunca, por el este desde el hemisferio norte, es muy curioso que hagan acto de presencia de forma espectacular en la época navideña.
Se supone que estarían mirando al amanecer del día siguiente, el día 25 de diciembre, el día de Navidad, tres días después del solsticio de invierno como el día más corto del año. Las culturas paganas precristianas europeas como la griega y romana o la celta y nórdica, y del Oriente como la hindú, persa, babilónica o del Asia Menor (Turquía), solían tener como curiosidad una deidad solar que nacía alrededor del 25 de diciembre, tres días después del día del Sol que muere, ese día del solsticio del 21, para resurgir al tercer día, el día 25, cuando se aprecia ya el sol más luminoso y duradero en el cielo (el Sol Invictus romano, que vence a las tinieblas). Las culturas paganas celebraban enormes fiestas en los días de diciembre del solsticio, celebrando la alegría y la esperanza, porque volvería la luz y el calor, la cosecha, el abastecimiento y la comida, la abundancia. En la cultura cristiana se celebra el Nacimiento de Cristo, que trae paz y amor al mundo, muriendo por los pecados de la Humanidad, resucitando al tercer día de su muerte.
Algunas teorías antiguas decían que el propio cinturón de Orión era la misma Estrella de Belén, la que guió a los magos, pero los estudios recientes al respecto, parecen tirar más por la posibilidad de la Gran Conjunción en Piscis del 6 A.C a la que apuntaba Kepler, aunque a lo largo de la Historia, y hasta hace unas décadas, se estudiaba la posibilidad de que la famosa estrella de Belén fuese un cometa o una supernova incluso. Y mucho se ha hablado de que aquello que seguían los magos, era nada menos que Sirio, teoría sostenida durante décadas.
El enigma del Cinturón de Orión y su vinculación a tanta leyenda de muchísimas culturas y el mes de diciembre, ha provocado que se realicen estudios astrológicos al respecto que son bien interesantes.
Partiendo de la teoría de que Orión fuera la estrella de Belén, este bloguero, David Peters, realizó su propio estudio al respecto tomando el programa Stellarium, usó la localización de Tel Aviv en Israel, como capital del país y ciudad grande, siendo este país el original de Jesucristo, para comprobar cómo se coloca Orión con respecto al Sol en el mes de diciembre, especialmente el día de Navidad, que es lo que verían los Magos de Oriente para guiarse desde el propio Oriente hacia el oeste, la ciudad de Belén de Judea. Estudio realizado en el 2018, en la imagen muestra que las estrellas de Orión no se alinean con el Sol, o apuntan directamente a él en el amanecer del día de Navidad, pero las estrellas del cinturón apuntaban algo lejos del este en el amanecer.
Ahora viene lo bueno, que debido a la precesión de los equinoccios, ese ciclo que toma años y años y provoca que las constelaciones se muevan por el cielo, la cosa empieza a cambiar.
Imagen tomada del 2018:
Y ahora según David Peters, resetea el programa Stellarium al Año Cero, tomándolo como referencia al año del Nacimiento de Cristo, y esta vez las estrellas de Orión están alejadas del Sol en el momento del Amanecer del día de Navidad:
Por lo tanto, según este experimento, esa leyenda de Tres Reyes en el Cielo no se dio por la época presunta del nacimiento de Cristo, tuvo que ser algo mucho anterior esa vinculación de Orión al Sol naciente en diciembre, estaríamos hablando de algo muy muy antiguo.
Peters decide resetear el programa al año 3000 A.C, en el día del solsticio de invierno, encontrando una sorpresa. Esta vez, las estrellas del cinturón se encuentran alineadas perfectamente al Sol y a ¡Sirio!
Como comenta el autor en el blog, ese fenómeno extraordinario pudo ser el que motivara a los habitantes de las Islas Británicas, a construir Stonehenge por esa época, y en Egipto antiguo se estarían erigiendo las Pirámides.
Info del blog del cual se extraen los datos: https://pterosaurheresies.wordpress.com/2018/12/24/a-christmas-story-the-three-kings-and-the-star-of-bethlehem/
Normalmente esto lo vemos en documentales de la tele o en ensayos y libros, esa posibilidad de vinculación a Orión en ritos sagrados y construcciones de lugares sacros de civilizaciones antiguas, aunque no siempre ha quedado claro y son teorías.
Y hoy en la celebración de Reyes, vemos a nivel astronómico y astrológico, cómo Orión ha estado involucrada en eventos de importancia durante el solsticio del invierno con el Sol (nuestra Navidad actual), y gracias a estos datos, descubrimos datos muy interesantes.
Aparte del ámbito astronómico, está lo que las culturas alrededor del mundo han considerado sobre el cinturón de Orión. Muchas eran las culturas que sostenían que los humanos venimos de las estrellas al igual que los dioses, los egipcios creían esto, y los persas, y los babilónicos, los indios nativos americanos, tribus nativas de México en la era precolombina; incluso hay una leyenda dentro del pueblo gitano que dice que provienen de esta misma constelación de Orión y lo dice la canción "que tengo sangre de reyes". Estudiada, rastreada, fascinante y misteriosa. Unas culturas vinculaban al Cinturón de Orión con lo divino, otras a lo sagrado, pero en unanimidad, todas le asignaban un estatus real, de realeza, las estrellas son llamadas Los Tres Reyes en varios idiomas y dentro de muchas culturas a nivel global (buscad que os va a interesar), y nosotros en español, las llamamos Los Tres Reyes Magos: Melchor, Gaspar y Baltasar.
"Y habiendo oído al rey los Magos se fueron; y he aquí que la Estrella que habían visto en el Oriente iba delante de ellos, hasta que llegó y se detuvo donde estaba el Niño. Cuando vieron la Estrella, se regocijaron sobremanera con gran alegría. Y entrando en la casa vieron al Niño con su madre María, y postrándose, le adoraron; y abriendo sus tesoros les presentaron sus obsequios, oro, incienso y mirra". Mateo 2:9-11
El día 21 de diciembre, a las 20:20 horas (hora española), coincidiendo con el solsticio de invierno en el hemisferio norte, que tendrá lugar a las 11:02 horas a.m., viviremos uno de los acontecimientos astrológicos más esperados del año.
El aciago 2020 empezó primero con el eclipse lunar en Cáncer del día 10 de enero, que estaba marcado por la paranoia. Dos días más tarde, tuvo lugar la Gran Conjunción de Saturno y Plutón en Capricornio, la "responsable" de la tremenda crisis provocada por el Covid19, que se afianzó muy fuerte en marzo cuando Júpiter, el expansivo, se unió a la misma formando un triple stellium; no fue el único en unirse, también lo hizo Marte el día 11 de marzo. De esta formación se sabía, iba a producirse un evento histórico que cambiaría la vida de los habitantes del planeta, lo que sucedió después rompió todos nuestros esquemas.
Si el año empezó con un evento destructivo, el año terminará con un evento que invita a la esperanza, y trae mejores perspectivas de futuro. El solsticio de invierno trae una bonita formación en el cielo formada por la conjunción de Saturno y Júpiter en Acuario, otro evento histórico muy esperado por la comunidad astrológica.
La Estrella de Belén
Se vincula esta Gran Conjunción con la Estrella de Belén, aquella que guió a los Magos de Oriente hacia el pesebre de Belén, donde nació el mesías Jesús de Nazaret, siendo este símbolo celestial el que anunciaba en el cielo el nacimiento del denominado "Rey de los judíos", redentor del mundo, terminando con una era, la de Aries, para dar comienzo a una nueva, la de Piscis. El pez es uno de los símbolos de Cristo, así como también lo fue el cordero, a modo sacrificial (el que muere por los pecados del mundo), mientras que el Pez era el símbolo de la vida, la señal del cielo que indicó su nacimiento, la Natividad de Jesús, que es lo que celebramos en las fechas del solsticio de invierno, la Navidad, como culto solar adaptado a las fiestas romanas de las Saturnales, el Sol Invicto.
Desde que se forma el solsticio de invierno, el Sol se queda tres días en la misma posición, que no varía desde el 21 hasta el 24 de diciembre, tres días "quieto" en la misma posición, para a partir del 25 directamente, ir aumentando su luz hasta el solsticio de verano seis meses en junio, siendo entonces lo que cristianamente se celebra, como la Natividad de San Juan Bautista, primo de Jesús y uno de los más grandes profetas, que se convierte en el único santo de todo el santoral después de Jesús, del cual se celebra su nacimiento. Es esta otra fiesta cristiana adaptada a celebraciones paganas de civilizaciones antiguas, que festejaban "la muerte del rey Sol y nacimiento del rey del Acebo" (en junio) y el nacimiento del rey Sol y muerte del rey del Roble (en invierno) (*estas celebraciones eran celtas y sería San Juan Bautista el rey del Roble y Jesús de Nazaret el rey del Acebo en la adaptación cristiana). Para el solsticio de invierno ocurre un fenómeno curioso, y es que ese sol invicto que no muere, sino que nace, "resucitando al tercer día" (del solsticio) cuando se ha quedado tres días "muerto", lo hace delante del cinturón de Orión, la Cruz del Sur, donde en el Este está Sirio, de la que decían que era la Estrella de Belén. El Sol en diciembre, después de tres días "muerto", nacería delante de los Tres Reyes del Cielo: Orión.
Son varias las culturas antiguas las que asociaban el 25 de lo que ahora es diciembre, entonces los días del solsticio, al nacimiento de sus dioses más importantes. Hermes y Dionisio en Grecia; Krishna y Buda en la India, del profeta Zoroastro se decía que también había nacido en las fechas del solsticio; Horus en Egipto, Adonis en Fenicia, Tammuz en Babilonia y Mitra en Persia. Según esta leyenda, todos estos dioses compartirían cumpleaños con Jesús de Nazaret, aquel que nació con el anuncio en el cielo de la Estrella de Belén. Pero, ¿qué fue la Estrella de Belén?. ¿Nació Jesús de Nazaret en la Belén de David un día 25 de diciembre?.
En la portada de este blog tenemos lo que pudo haber sido la famosa Estrella de Belén, que fue la mega conjunción entre Saturno-Sol-Júpiter-Venus-Luna en el signo de Piscis, acaecida allá por el año 7 AC, la fecha aproximada de la que los expertos dicen, fue el año en el que realmente nació el mesías cristiano. Si nos atenemos a los evangelios, éstos nos indican lo siguiente:
"Había en la comarca unos pastores que dormían al raso, y vigilaban por turno durante la noche su rebaño. Se les presentó el Ángel del Señor y la gloria del Señor los envolvió en su luz. No temáis pues os anuncio una gran alegría, que lo será para todo el pueblo. Os ha nacido hoy en la ciudad de David, un Salvador, que es el Cristo del Señor. Gloria a Dios en las alturas y en la Tierra paz a los hombres de buena voluntad" Lucas 2-8:9
En el hemisferio norte, en los países del Mediterráneo, donde se ubica Israel, sacar al rebaño a pastar no se hace en invierno, si no que se hace poco antes de que tenga lugar el equinoccio de primavera; como nos dicen los evangelios, aquellos pastores que recibieron la Buena Nueva, no parece muy lógico que estuvieran durmiendo al raso un mes de diciembre. Teniendo en cuenta que los expertos asocian la Estrella de Belén con la mega conjunción planetaria del 7 A.C formada en Piscis, ya nos indica una pista de cuándo pudo nacer realmente Jesús de Nazaret; los planetas nos informan que Saturno-Júpiter-Venus-Luna estaban en Piscis, con el dato más significativo de todos: el Sol, que se unió a esta mega conjunción y si el Sol está en Piscis, conjunto a Venus (como aliciente la misma Luna), estamos hablando del mes de marzo.
Pero ya se sabe que para adaptar el cristianismo a las culturas paganas, se van acoplando celebraciones a fechas significativas de aquellas culturas, y ya se sabe, que colocar el nacimiento de Jesús un 25 de diciembre (el Sol Invicto romano, la fiesta del Solsticio), fue cosa del Concilio de Nicea, el que promulgó que el cristianismo sería la religión oficial del Imperio. Y desde entonces hasta ahora, llevamos siglos y siglos celebrando el simbólico nacimiento de Jesús un 25 de diciembre.
El astrónomo alemán Kepler apoyaba esta teoría de la Estrella de Belén y la Gran Conjunción que tuvo lugar en Piscis en el 7 A.C (siete años antes del Año 0), y se adelantó a un hallazgo que tuvo lugar en 1925, cuando se hallaron unas tablillas cuneiformes en Sippar, antigua ciudad al norte de lo que fue Babilonia, en la confluencia del Tigris y del Eúfrates, expedición realizada a cargo del alemán P. Schnabel y que se pueden ver hoy día en el Museo Estatal de Berlín.
¿Qué anunciaba entonces aquella Estrella de Belén que ha permanecido por miles de años en la memoria colectiva?. La conjunción planetaria, que tenía planetas rápidos, como Sol-Venus-Luna en Piscis, tenía a los dos pesos pesados del Cosmos, Saturno y Júpiter. Cuando éstos dos se únen, va "nacer algo"; entonces en el siglo 7 AC (las cuentas con el año 0 del Nacimiento de Jesús no cuadran) lo que la estrella de Belén anunció, fue el Nacimiento de un nuevo ser, mesiánico, que vino a cambiar el mundo (y vaya si lo hizo), fue el nacimiento de una nueva era, teniendo en cuenta la posición planetaria, la era de Piscis, el Pez, "pescador de hombres", Jesucristo.
Si la Gran Conjunción de Saturno y Júpiter de Acuario de 2020 es una nueva "Estrella de Belén", ¿qué nos está anunciando?, algunos dicen que se trata del nacimiento de una nueva era, la de Acuario (esa que vendían ya en los años 60 con el movimiento hippy de paz, amor y amor libre y que no tiene absolutamente nada que ver con esto); otros que es el nacimiento del denominado Nuevo Orden Mundial, con tinte siniestro y destructivo de dominación poblacional y vinculado a las fuerzas oscuras que controlan el planeta. Desde luego que es el anuncio de algo que está por venir y que va a cambiar la Historia. Si os fijáis, aparece mucho el término "nuevo": Nuevo Orden Mundial globalista, nueva normalidad, nueva era, etc. Lo nuevo, está representado por el signo de Acuario.
A esta conjunción se le atribuye el nacimiento de un evento "mesiánico" o que producirá un cambio considerable en la Humanidad. No hay que esperar la llegada de un líder mesiánico que nos traerá el gran cambio, porque nadie externo viene a salvar a nadie (y menos en estos tiempos en los que cada uno va a lo suyo imperando el ego y el egoísmo), que es lo que muchos pueden creer si tienen la personalidad gregaria enfocada a que sea un líder fuerte el que cambiará el transcurso de la Historia; por lo que no esperéis que un señor, mucho menos un político, va a venir a traernos paz y amor. Cuando la sociedad pasa por un problema, y esta vez tenemos un problema considerable en el mundo, es normal que la opinión colectiva sea la de "a ver si viene alguien y nos saca de esto". No es así como funciona la cosa, el cambio al que se refiere esta conjunción básicamente, reside en la mente colectiva, como marca el signo de Acuario, el cambio, estará en nosotros mismos o no estará. El que quiera un cambio, que empiece por sí mismo, y éste será en la mente.
Aunque el pistoletazo de salida es el 21 de diciembre de 2020, será el día 11 de febrero de 2021 cuando se de un mega tránsito en Acuario, pues el Sol, la Luna, Venus, Mercurio, Júpiter y Saturno estarán todos en este signo, casi parecido a aquella estrella de Belén bíblica del 7A.C cuando se unieron Sol-Venus-Luna-Saturno en Piscis. Se repetirá el evento, pero con Mercurio añadido y en el signo de Acuario.
Características de las Grandes Conjunciones
En los últimos 200 años de Historia las grandes conjunciones de Saturno y Júpiter se han dado en signos de tierra. De ahí viene el progreso de la Revolución Industrial, el dinero, la moneda, el poder financiero, la construcción de maquinarias, industrias, fábricas, edificaciones y el fenómeno de la ampliación de ciudades, emigración masiva a las mismas y el comienzo bestial del urbanismo por todo el mundo.
Esta Gran Conjunción en Acuario es muy especial, no teníamos una similar desde nada menos que el año 1405, que anunció años antes los cambios históricos que estarían por venir: la invención de la Imprenta, el Descubrimiento de América, y las reformas protestantes en Europa que supusieron el cisma con el Vaticano. A todos estos eventos en su conjunto, se lo denominó el Renacimiento, ese resurgir artístico, cultural, intelectual y científico, que trajo términos muy vinculados con Acuario: el Nuevo Mundo, el Nuevo Hombre Renacentista, época de genios, Da Vinci, Miguel Ángel, hombres rompedores como Martin Lutero, Copérnico, Galileo Galilei. Con el Renacimiento se dio por finalizada oficialmente la Edad Media, y se dio comienzo a esa nueva era de cambio profundo, y de mentalidad más abierta y relajada. Se salía de la época oscura medieval, para dar paso a toda una nueva etapa en la Historia que rompe con la anterior. El término "rompedor" será algo que hará gala del tiempo que se nos avecina.
Es un grandísimo evento, que no sólo va a durar el día 21 de diciembre, está para quedarse por todo el año 2021, pero tiene su influencia en los años posteriores. Saturno se quedará en Acuario hasta el año 2023 aproximadamente, y Júpiter estará en este signo hasta diciembre de 2021, aunque la influencia de la conjunción será larga.
Va a marcar el fin de un ciclo de los últimos 20 años y el comienzo de uno nuevo, que serán 200 años nada menos de grandes conjunciones en signos de aire, signos de la mente y de la comunicación. Cuando las conjunciones cambian de signo, se le denomina en astrología la Gran Mutación, pues el cambio que se produce es considerable. El grado en el que va a tener lugar será el 0º29 de Acuario, y a parte de ocurrir el mismo día del solsticio de invierno, cuando el Sol está en el 0º de Capricornio, el evento tiene lugar sólo una semana después del eclipse solar en Sagitario, que evocaba felicidad y esperanza. La verdadera conjunción es la que se ve a ojos vista en el cielo desde la Tierra, y la principal conjunción es la que se basa en cálculos matemáticos; hay diferencias debido a esto, y es por ello, que matemáticamente la Gran Conjunción ya se estaba formando en Acuario el día 14 de septiembre, pero será visible el día 21 de diciembre. (se entiende mejor desde el punto de vista científico astronómico).
Los últimos 20 años han sido el proceso de cambio de la era de las grandes conjunciones en Tierra de los últimos 200 años, a las que ya tendrán lugar en signos de aire en los próximos 200 años. Eso explica la tremenda revolución en tecnología, Internet, información y comunicación que hemos vivido en este tiempo. Entre 1980 y 1981 las grandes conjunciones se dieron en Libra, y explicaría cómo a partir de esa época, las relaciones han cambiado totalmente, así como la formación de los matrimonios, la llegada del divorcio, familias recompuestas, el cambio en cuanto a la percepción del matrimonio, la pareja y las separaciones.
La Gran Conjunción del 21 de diciembre en Acuario
Júpiter y Saturno juntos supone una interesante combinación, pues se trata de la unión de los dos planetas más grandes del Zodíaco, y por contra de lo que se pueda pensar, funcionan muy bien juntos. Es como tener trabajando en equipo al padre (Saturno) y al hijo (Júpiter). Saturno es el maestro, el que hace aprender con lecciones duras pero lo hace por nuestro bien; también implica restricciones, limitaciones, miedos, o cansancio, pero es éste planeta el que da las mejores recompensas, mucho mejores, que las que pueda dar su hijo Júpiter, conocido por ser un sonriente repartidor de buena fortuna y expansivo, bonachón, despreocupado y fiestero, pero generoso, noble, y con un fuerte componente espiritual. En el signo de Acuario ambos van a invitar a las personas a cambiar la percepción mental, y que Saturno esté por aquí, indica que será "quieras o no"; no se dice en ningún momento que se tenga que pensar de determinada forma, pero sí que hay que abrir la mente mucho más, aunque cueste, por muy terco que se sea, es toda una invitación a la apertura y a adentrarse en el mundo del saber. Hablando el plata, ser cerrado de miras y muy cabezón, sólo traerá problemas; no se dice que se tenga que ser un moderno, porque el ser abierto de mente no tiene nada que ver son ser moderno o tradicional, los hay que se dicen que son "modernos" pero pueden ser más reaccionarios y tiranos que aquellos a los que consideran anticuados o conservadores, y los hay conservadores que pueden dar lecciones a los que se dicen "adelantados a su tiempo". Pero esto se refiere a un cambio profundo de pensamiento, donde no estaría mal poner el ojo crítico a toda la información que a uno le llega a la mente. Acuario es un signo muy intelectual y cerebral, serán estos aspectos donde haya más estimulación, todo lo que suponga expansión y progreso en Ciencia, Tecnología, y avances de todo tipo, será bienvenido y de hecho será la característica de esta era.
Puede sonar a tópico, porque de esto se ha hablado muchas veces en el blog, pero Saturno y Júpiter en Acuario es sin más, un tremendo despertar. Ahí está la clave de lo que supone este tránsito. Despertar de una mente dormida, abrir los ojos después de haberlos tenido cerrados por mucho tiempo. Buen ciclo para que cada uno saque sus propias conclusiones, tener sus propias opiniones, atreverse a decir lo que se piensa y poner en duda lo que le están contando a uno. Mala época para ser uno más de la masa, es más: salirse de la misma es otra de las características de esta conjunción, que busca originalidad y diferenciarse del resto.
Es un tiempo expansivo, de crecimiento y de buena fortuna. Se ha alcanzado el pico de un ciclo que se ha terminado y se empieza otro nuevo, para estas alturas, mucha gente que haya sentido un despertar, habrá notado que ha llegado mentalmente al clímax de su vida y ahora empieza una etapa distinta, se accede a un nivel superior. Sensación de haber alcanzado plenitud después de haber vagado por las más oscuras tinieblas.
Hay que recordar la limitación que supone Saturno, que se coloca en el signo de la libertad como lo es Acuario, siendo Júpiter el que expande. El tema principal desde que tenga lugar el comienzo de la conjunción hasta por lo menos los primeros meses del año 2021, será la libertad restringida de la vida cotidiana, y si hasta la fecha ha sido por la crisis del Covid19, de ahora en adelante será una cuestión de poner en tela de juicio el poder que ejercen los gobiernos con respecto a la libertad del ciudadano, y hasta qué punto aguanta el ciudadano. Porque ya no será cosa de un virus, será cosa de hasta dónde han obtenido poder para seguir controlando al ciudadano, que es muy diferente (consecuencias de haber tenido los ojos bien cerrados durante la gran conjunción anterior en Capricornio). Es por ello, que si no se pone solución pronto a este problema y no se hace nada, ahí estarán las restricciones hasta cuando el ciudadano quiera, porque nadie debe esperar en ningún momento que vaya a venir un "mesías" a salvarle, eso hay que tenerlo muy claro, el que quiera un cambio lo va a tener que hacer primero en su mente, y siendo Acuario, el colectivo, como no haya una unión ciudadano, no se llegará a nada. Acuario rige masas y grupos de gente, no hay que olvidarlo.
Los despertares mentales serán producto de haber llegado a ese punto clave de la vida en el que uno se realiza sus preguntas, pero no obtiene respuestas, o las tiene dentro de sí mismo. Cuando uno analice su vida privada, la vida laboral, reglas, normas, trabajos, jefes que exigen, beneficios que a cambio no se obtienen, demasiada responsabilidad, y la vida sigue igual y no sucede nada, se dará ese despertar que anima a cambiar totalmente de vida. Pero si uno se siente frustrado y no hace nada, entonces el cambio radical vendrá de forma inevitable, y así es como funciona esta conjunción: cuando sientes que tienes todo hecho y que estás relajado con la estabilidad, la vida te puede dar un giro que no esperas, porque aunque uno pensaba que lo tenía todo hecho, aquello que se creía consolidado no tenía las raíces lo suficientemente fuertes como para estar bien sujeto. Si se desploma lo creado, es porque no tenía buenos cimientos, y lo hará de un día para otro sin avisar, por lo que caerán relaciones que parecían sólidas y se darán divorcios inesperados y sorpresivos que dejarán con la boca abierta, familias que parecían unidas y se vienen abajo; políticos que parecen tener la silla asegurada y el día menos pensado caen desde arriba, empresas, sistemas, instituciones, el sistema educativo, creencias, incluso religiosos de cualquier credo y cultura pueden provocar un cambio en aquellas creencias que parecían bien establecidas (bajo una conjunción de este estilo tuvo lugar la Reforma Protestante, por ejemplo). Lo que se acabe, será porque tenía que acabar y no tenía lugar, ya que no valía y era inútil, y hay que dejar espacio para las nuevas oportunidades que llegan, porque lo que había o tenía lugar impedía el crecimiento personal.
Se da la curiosa circunstancia de sentirse o muy restringido o sin embargo, no sentir absolutamente nada al respecto. Algunos estarán todavía con los rescoldos de las restricciones provocadas en el 2020, otros no, porque el sentirse restringido de movimiento va a ser una cuestión mental. Si una persona está constantemente pegada a la TV haciendo caso de lo que ve, probablemente esa persona seguirá sin salir de su casa en el 2021, los que hayan apagado la tele y se lo hayan cuestionado, estarán haciendo su vida de nuevo. Será ahora cuando se note más la división de los "dos bandos" que se han dado en el año 2020 por la crisis del Covid19: los que se han creído todo y los que no se han creído nada, para cuando llegue enero del 2021 a finales y se alcance el grado de la Gran Conjunción en Capricornio, grado número 22º, quedará de manifiesto el resultado de lo vivido en el año anterior.
Un tiempo en el que se verán sorpresas todos los días, se darán descubrimientos científicos, hallazgos insólitos, golpes de suerte, aparecerán oportunidades de expansión y crecimiento personal, también económico, por mucho que nos digan que el futuro es incierto. Precisamente es un gran signo para emprender negocios y volverse el jefe de uno mismo. Nuevas relaciones diferentes con personas que son el arquetipo de Acuario, distintas, originales o que suponen un soplo de aire fresco.
Hay que recordar, que desde el final de la Edad Media Júpiter y Saturno no habían estado en esta posición tan idéntica en Acuario, y aquello supuso el fin de "la noche oscura de los mil años" para dar paso al Renacimiento. Hay que hacerse a una idea del cambio colosal que trae en todos los sentidos esta Gran Conjunción.
Estrellas Fijas
Altair, una de las estrellas reales junto con Antares, Régulus y Aldebarán, es la estrella protagonista de este evento, ubicada en el 2º03 de Acuario, se la puede ver en el cuello del Águila. Estrella de visión cosmopolita, vinculada al mando y al orgullo, es un carácter dominante pero que no se deja dominar. Tiene la capacidad de otorgar clarividencia, influencia sobre otros, está ligada a la química, especialmente en su rasgo investigador. La mente es penetrante y tiene amplitud de miras, visión global. Altair se conecta con los grandes cambios atmosféricos y de temperatura, está presente en desastres naturales geológicos como terremotos, maremotos y tormentas.
Ambiciosa, liberal, Altair otorga riqueza un día y al día siguiente la quita. Es la estrella que rige a los Estados Unidos de América (ese Águila) por lo que será este país uno de los que sufran tremendos cambios históricos a lo largo de esta era. Altair es muy buena para el avance, las glorias militares, está presente en el sector de los misiles, la aviación. Tiene una cualidad muy característica, y es que Altair está presente en el auge y caída de las personalidades y mandatarios, por lo que será normal ver como presidentes de los gobiernos y primeros ministros, hoy están en lo más alto, y de forma disruptiva, acaban sus mandatos de la noche a la mañana, sea de la forma que sea: dimisiones por sorpresa, asesinatos, atentados, enfermedades repentinas o muerte repentina, legislaturas que se acaban de golpe por crisis o movimientos revolucionarios.
En Estados Unios han sido fueron unos pocos los presidentes que fueron elegidos bajo una Gran Conjunción, y sus mandatos fueron marcados por un final inesperado o tuvieron un momento cúlmen que supuso el fin del mismo: Abraham Lincoln (asesinado), Franklin D. Roosvelt (hemorragia cerebral), John F. Kennedy (asesinado), George W. Bush (le bastó meter a su país en una guerra para ser odiado en todo el mundo y al que le lanzaron una granada que no explotó para asesinarlo), William Henry Harrison (el primero en morir en el cargo, y que murió al mes de ser electo de una neumonía), James Garfield (asesinado), William McKinley (asesinado), Warren Harding (ataque al corazón estando en el cargo).
Las últimas elecciones de los USA, polémicas como hacía tiempo que no sucedían, se han celebrado un mes antes de una Gran Conjunción y el presidente electo (Joe Biden si no dicen lo contrario los tribunales), jurará el cargo al mes después de esta Gran Conjunción. Por lo que el próximo presidente de los USA, tiene papeletas para no durar mucho en la Casa Blanca.
La Gran Conjunción para España
Astrológicamente analizamos cómo estará el cielo el mismo día del solsticio de invierno de este 2020 que pronto dirá adiós.
Habrán pasado 9 horas desde que se produzca el solsticio de invierno, cuando el Sol llegue al 0º de Capricornio. A las 20:20 de la tarde (hora española), se colocan en conjunción Júpiter y Saturno en el 0º29 de Acuario.
El Ascendente de la carta para España se encontrará en el signo de Leo, estando el Sol ya en el 0º de Capricornio y cuadrando a la Luna en Piscis en la casa IX, que cuadra a su vez a Mercurio en Capricornio conjunto al Sol. La monarquía será altamente cuestionada en estos años venideros y el futuro de la misma es incierto, pudiendo sufrir reveses y no teniendo muy bien atado su futuro como institución en España, a menos que se planteen una reforma dentro de la misma.
La propia conjunción misma de Saturno y Júpiter con Altair se forma en la casa VI de la carta para España, poniendo el enfoque en el trabajo, el mercado laboral, que sufrirá una tremenda reforma, y viejos sistemas serán obsoletos, incluso quién sabe, puede haber un cambio profundo en el funcionariado porque el trabajo para el Estado se reforma y lo hará cada vez más con los años. El signo de Ssgitario influye en cierto modo ya que Júpiter, su regente, es el protagonista de este evento, y Sagitario es el signo que tiene ahora al Nodo Sur en tránsito, aparte de Venus, por lo que los eventos vinculados al mundo laboral serán kármicos: o se realiza una reforma considerable en el mundo laboral, o el pueblo español se abocará a enlazar esta crisis con la anterior del 2008, esto es: o se ponen soluciones y se lucha por un cambio, o el mercado laboral estará muerto; o se cambia el trabajo tal y como se ha venido sucediendo todo hasta ahora desde la última crisis, o no habrán cambios, también, se darán las circunstancias para que empresas y sectores que no estaban siendo éticas, ni funcionaban bien, y estaban cogidas con pinzas o no eran legales ni cumplían con derechos y estaban metidas en la ilegalidad, explotarán por los aires. No hay que olvidar que la crisis del 2008 supuso una excusa para los contratos basura contratos temporales, recortes, sueldos míseros y la creación de los contrarios por obra y servicio vistos como algo normal, "por la crisis" y se estaba viendo una situación laboral insostenible "por la crisis" porque "es lo que hay". Estirar este chicle demasiado hará que se termine de dinamitar lo que era insostenible a lo largo de estos años.
Esta Gran Conjunción estará cuadrando a Marte en la casa X conjunto al Medio Cielo, indicando que habrán cambios abruptos en el gobierno y puede ser posible que se den protestas importantes en el año 2021 (la Gran Conjunción influye para 200 años en adelante, no hay que olvidarlo), pero será algo normal ver protestas y no exentas de violencia, en los años venideros. Se podrá ver un cambio inesperado en el gobierno, o bien el presidente no termina el mandato o algo sucede que se rompe o se tienen que volver a dar otras elecciones. Añadiendo, que de ahora en adelante, el que quiera ser presidente del gobierno de España que se prepare para no tener el asiento bien pillado, porque estos años venideros se caracterizan por inestabilidad en el gobierno y en eventos que aparecen de golpe y sacuden al punto más alto de la jerarquía del país en política. La luna aunque en Piscis, está muy cerca de Aries, el signo donde está Quirón, y esto es anuncio de enfado en la masa y el pueblo, que sale de la confusión mental (Piscis) debido al letargo de un año donde han pasado cosas dignas de una pesadilla, y ahora se adentran en la realidad de la situación, y esto provoca enfado (Aries). A algunos les cuesta despertarse más que a otros y les sucede de golpe.
El Nodo Norte de Géminis en la XI invita a la unión del grupo y ciudadana, y si tenemos en cuenta que se avecinan cambios y que el primero está en la mente, como no haya unidad colectiva, no se hará nada y no habrá solución para nada. Va a depender mucho el que haya una unidad entre ciudadanos si se quiere avanzar en algo; el Nodo Sur en Sagitario en la V todavía mantiene a la gente anclada en el individualismo, pero es el que tira hacia adelante ese Nodo Norte en Géminis (ambos signos intelectuales y de adaptación) el que hace que sea incómodo para el colectivo el unirse, pero es ahí donde indica el camino el Nodo Norte. Para ello hará falta cambio de percepción, cambio mental, y en España estas cosas, cuestan mucho más que en otros países. España está en un momento crítico de su Historia. Y recordad: nadie vendrá a salvaros de absolutamente nada, no esperéis líderes mesiánicos.
La carta para España y la influencia de esta Gran Conjunción puede ser no muy halagüeña teniendo en cuenta lo escrito arriba, pero realmente lo es: se pueden producir cambios gigantescos y dependen de los ciudadanos, que éstos cambien la forma de pensar y se atrevan a abrir los ojos. Otra cosa es que esto se quiera llevar a cabo. El que el futuro sea halagüeño o no, va a depender muchísimo del colectivo y de la unión ciudadana. A España le pueden pasar dos cosas: cambiar de una vez o no hacerlo nunca, y hay que tener en cuenta una cosa: cuanto menos se luche por algo vendrá ese evento externo provocado por Saturno-Júpiter que se llevará todo de un plumazo, y será entonces, cuando uno piense en lo que pudo haber sido y no fue, aparece sensación de vacío y arrepentimiento. Será demasiado tarde.
Esta conjunción simboliza también el colosal peso de tener altas expectativas sobre uno mismo y sobre el futuro. Los niños nacidos alrededor del día 21 de diciembre de 2020 van a nacer con ese peso sobre sí mismos: ser los mejores en todo porque sus padres les inculcarán hacer cosas grandes bajo presión y si fracasan, puede ser un trauma psicológico tremendo sobre esos niños cuando sean mayores. Esto se debe a que los padres verán erróneamente a sus hijos como si fueran seres especiales, que ya sabemos que desde el punto de vista de los padres sus hijos siempre serán especiales, pero algunos pueden colocarle, fruto de una imaginación desbocada y por delirios de grandeza, un aura mesiánico a sus propios hijos, y de aquí puede salir una generación que parezcan obligados a conseguir cosas para hacer feliz a los padres, con la consecuencia de llevar una frustración y depresión de por vida, niños my esclavos de las perspectivas y gustos de los padres.
Por otra parte surgirá ese fenómeno de colocarles a los demás un peso e intento de culpa y arrepentimiento, que es algo que obra Saturno sobre las altas expectativas y felicidad, que son cosas de Júpiter. Después del año que hemos tenido, los habrá, que todavía culparán a los demás de atreverse a ser felices y de tener esperanza y alegría. Por parte de la autoridad política, habrán intenciones de colocar culpabilidad a los ciudadanos por atreverse a ser felices, y esa será la dinámica en el año 2021, donde se jugará constantemente con confinamientos y con noticias donde dejarán a los ciudadanos como culpables y responsables de lo que pase, para meter normativas de restricciones en libertad (Acuario) en operaciones psicológicas que serán intentos de hundir la moral desde la autoridad (Saturno) hacia la alegría y esperanzas del pueblo (Júpiter). Aparecerán personas tiranas que de por sí son muy pero que muy negativas (que tengan Saturnos mal aspectados en sus cartas para con esta conjunción) y que obrarán como esa persona desagradable que aparece en la vida de uno con intención de amargarla, impidiendo la felicidad de las personas de su alrededor, agentes del mal, con los que hay que tener cuidado a la hora de relacionarse, abundarán los aguafiestas. Hemos tenido este año un avance con los "policías de balcón", por poner un ejemplo. Gente que se creerá con derecho a decirles a los demás lo que tienen que hacer en cuanto a sus libertades. Otra de las lecciones que trae Saturno aquí es el aprendizaje a vivir en comunidad.
Esto viene marcado especialmente porque tanto Saturno como Júpiter van a cuadrar a Urano en Tauro que encima está conjunto a Lilit, el intento de excluir a otro por ir por libre y al que se le acusará de ser feliz o por querer ser libre*
(*En la carta para España Urano y Lilit están en la casa X y esta posición suele ser anuncio de caídas del gobierno o incluso de un daño o atentado hacia aquel que esté en el gobierno. Pedro Sánchez tiene su Marte natal en el AC conjunto a esta misma conjunción tan destructiva).
Se van a revisar los temas que tienen que ver con la libertad o el "exceso" de la misma a la hora de educar (aquello que debe tener unos límites) y que ha sido algo normal en los últimos años (niños a los que se les ha prestado poco caso porque han sido educados literalmente por aparatos electrónicos), la libertad misma, las restricciones. esa mezcla de libertad o necesidad de la misma y la restricción impuesta; la libertad que requiere de una imposición de restricción (para algunas cosas) y aquella libertad necesaria a la que le han colocado obligatoriamente una restricción. Especialmente en este año, ha sido curioso ver cómo hay personas que pueden llegar a disfrutar con "la nueva normalidad" y con las restricciones de libertad ya sea el ciudadano que lo ve bien o aquel que está en algún sector profesional y al que le ha venido bien; actuando con cierto poder y gusto por el mismo para aplicar estas normativas (personas que no tenían poder y que ahora tienen algo y pueden obrar de forma abusiva, desde el supermercado hasta en la iglesia, en la tienda donde se realiza la compra o el banco, el comercio o la escuela). Este será uno de los temas principales del año 2021, como secuela de lo que sucedió en el 2020.
Así se ha ido formando poco a poco la conjunción desde octubre del 2020 hasta el día 21 de diciembre de este año.
La estrella de Belén fue aquella que guió a los Reyes Magos, que eran más bien hombres sabios, y por serlo, supieron interpretar aquella estrella (eran astrólogos) y supieron alcanzar su destino: el Portal de Belén, donde nacería Aquel que vino a cambiar el mundo y su Historia, Jesús de Nazaret, hace ya más de 2000 años. Siguieron la estrella como guía, porque sabían lo que significaba aquella estrella y que era lo que traería. La estrella de Belén trajo un cambio para la Humanidad, y estaba escrito en la escrituras sagradas, mucho tiempo atrás.
Y tú, ¿sabes cuál es ya tu camino?, guíate por la Estrella de Belén, que te va a conducir a tu destino, ¿y cuál es tu destino?, está en tu mente, en ti mismo.
Que esta "Estrella de Belén" sea positiva y os guíe por vuestro camino.
Os deseo una Feliz Navidad, llena de salud, paz, amor y tranquilidad.
"Nacido Jesús en Belén de Judea, en tiempo del rey Herodes, unos magos que venían del Oriente se presentaron en Jerusalén, diciendo: "¿Dónde está el Rey de los judíos que ha nacido?. Pues vimos su estrella en el Oriente y hemos venido a adorarle. "En oyéndolo, el rey Herodes se turbó y con él toda Jerusalén. Convocó a todos los sumos sacerdotes y escribas del pueblo, y por ellos trataba de averiguar el lugar donde había de nacer el Cristo. Ellos le dijeron: "En Belén de Judea, porque así está escrito por el profeta:
" Y tú, Belén Efratá, tierra de Judá, no eres, no, la menor entre los principales clanes de Judá; porque de ti saldrá un caudillo que será pastor de mi pueblo, Israel."
Entonces Herodes llamó aparte a los magos y por sus datos averiguó el tiempo de la aparición de la estrella. Después los puso en camino de Belén, diciéndoles "Id e irformaros bien sobre ese niño; y cuando le encontréis, comunicádmelo, para ir también yo a adorarle."
Ellos después de oír al rey, se pusieron en marcha, he aquí que la estrella que habían visto en el Oriente, iba delante de ellos, hasta que llegó y se detuvo encima del lugar donde estaba el niño. Al ver la estrella se llenaron de inmensa alegría. Entraron en la casa; vieron al niño con su madre María, y postrándose, le adoraron; luego abrieron sus cofres y le ofrecieron dones de oro, incienso y mirra.
Después, avisados en sueños que no volvieran donde Herodes, se retiraron a su país por otro camino".
Adoración de los Magos, evangelio de Mateo; 2 1-17. Biblia de Jerusalén
Y nunca se supo más de ellos. A donde fueron, al menos en aquellos tiempos, porque han pasado más de 2000 años y aquí siguen; presentes, todos los años. Sabemos perfectamente quiénes eran son.
Niños y mayores les esperan ilusionados; pocas celebraciones populares son celebradas con tanto entusiasmo por parte del pueblo como la fiesta de los Reyes Magos. Tal vez puedas ser ateo, no creer en Dios, te puede dar igual la Navidad, pero presente en la memoria colectiva permanecen, después de más de 2000 años, siendo los personajes bíblicos que hasta el más ateo conoce a la perfección, y se los conoce hasta por sus nombres. Tal vez no veas una procesión en Semana Santa ni de lejos, pero puede que salgas cada 5 de enero a ver sus cabalgatas y desfiles, porque tienen magia, y hasta te siguen dando ilusión.
Todos los años se les rinde un homenaje en este blog, cuya portada de página está dedicada a ellos y la estrella que les acompañó a su destino, y la vinculación que tenían con el hombre más famoso de la Historia, Jesús de Nazaret. (por si os interesa):
Tras salir de Belén, ¿dónde fueron, ¿qué fue de ellos?. Siempre será un misterio. El único evangelio que los menciona es el de Mateo, pero no dice sus nombres, sólo dice "unos magos". "Magos"; si fueses magos, tal y como conocemos el concepto hoy día, como hechiceros, practicantes de la magia o del ocultismo, no hubieran sido celebrados por el Cristianismo. La palabra "magos" viene del griego magós, un vocablo que hacía referencia a "hombres sabios" "hombres de ciencia", y este vocablo también hacía referencia a doctores, en el sentido de aquel que ostentara este título, era considerado un hombre muy sabio, ilustre, que incluso pertenecía, por su gran sabiduría, a una casta sacerdotal.
El "Auto de los Reyes Magos", pieza dramática toledana escrita probablemente en el siglo XII, considerada la primera obra teatral española y en castellano, los define claramente como "steleros", en castellano "estrelleros": que saben leer e interpretar las estrellas, esto es: astrólogos.
Ya se puede apreciar en el pasaje bíblico cómo la profecía de Miqueas profetizaba el nacimiento del rey de los judíos anunciado por una estrella; los "magos" de Oriente llegaron a Jerusalén porque habían visto a la "estrella", al rey Herodes el Grande le tenía perturbado esta estrella pues la misma anunciaba a un rey que no era él y que venía a cambiar el transcurso de la Historia...
Uno debe saber de estrellas para saber qué quieren decirnos éstas, los magos dejaron atrás sus tierras por esa estrella, que fue la que les iba indicando el camino donde exactamente nacería aquel que vendría a ser el Mesías, cuyo nacimiento fue vaticinado por los profetas que aseguraban "será anunciado por una estrella".
Una estrella, ¿cuál?, ¿qué estrella provoca que unos sabios muy ricos cojan a sus séquitos y partan a un largo viaje para entregarle a un niño, nacido en un pesebre muy pobre, oro incienso y mirra?.¿Qué estrella era la que traía de cabeza a Herodes, que temía que una criatura tan inocente como un niño le fuera a usurpar el trono de "rey de los judíos"?. ¿Qué misterio guardaba la estrella de Belén?.¿Cómo vendría a ser de importante ese niño para provocar tal expectación y a la vez, en algunos, hasta miedo y respeto?.
Durante años se habló de Sirio, o la estrella Polar, otros decían que era la "estrella del Este". Pero la comunidad astrológica desde hace muchísimos años, se puso de acuerdo para afirmar, que probablemente lo que vieron estos "magos" muy sabios venidos del Oriente, fue la Gran Conjunción formada entre el Sol-Venus-Luna-Saturno-Júpiter en Piscis, entre febrero del siglo 7 A.C y febrero del 6 A.C; lo que indicaría que Jesús nació bajo el signo de Piscis (y una carta astral muy Piscis), en las fechas cercanas a la primavera de aquellos tiempos. La estrella que anunciaba el advenimiento de ese "Pez", que era pescador de hombres, e hizo a sus discípulos apóstoles, pescadores de hombres a su vez. En la profecía se anuncia que nacería "de una virgen", que "refulge en el cielo vestida de Sol con una corona de estrellas", y que el niño nacería "en la casa del Pan".
Como un pez se le identificaría por milenios, y así era su símbolo con el que se identificaban los cristianos primitivos (mucho antes de considerar a la cruz como emblema en Cristianismo). Las escrituras anunciaban que el niño nacería en la ciudad de David, y esa ciudad, era Belén.
A su madre, María, se le da el título de Virgen María, por ser "sin pecado concebida" (mujer virtuosísima y sin mancha). El signo opuesto a Piscis es Virgo, la virgen, que sostiene una espiga en la mano, y de la espiga, se produce el pan.
Belén, en hebreo "beth-lehem", significa "la casa del pan". Belén fue siempre muy pobre, ciudad de peregrinaje desde los tiempos de Raquel, y no obstante, es ciudad "de reyes", David, y su descendiente, Jesús, al que se le da el sobrenombre "de Nazaret", por ser su padre José, procedente de aquella ciudad.
Estaba escrito en las estrellas, desde tiempos inmemoriales, "desde que el mundo es mundo". Aquel que vendría a cambiar el curso de los tiempos, sería un "pez", un rey, nacido de Virgen en la casa de pan de la ciudad de David. Y esto lo sabían los sabios, que entonces eran "magos", pues eran hombres de ciencia, y entonces y hasta hace no tanto, la astrología era una ciencia respetable como otras tantas (hoy os dirán que no, pero eso nos da igual).
Astrológicamente, se dice de la conjunción Saturno-Júpiter que está presente en nacimientos de profetas mesiánicos. La estrella pues, no era una estrella cualquiera si tenía ese simbolismo, esa importancia, y era bien visible en el cielo, tanto, que sirvió de guía a los sabios. Qué importante vendría a ser esa estrella, y para apreciar esa importancia, había que conocer su significado, y eso lo sabían los sabios, a los que en la lengua de entonces se les llamaban "magos", los sabios que eran estrelleros.
Y entonces, los magos, esos sabios, los estrelleros, sabían leer e interpretar las estrellas, con el tiempo, recibirían el título de Reyes, pues la tradición dice que llegaron a Belén con un fastuoso séquito para adorar al niño, al que entregan esos dones carísimos. Si se tiene séquito, se viaje lejísimos con esos preciosos materiales, se presume que tienes un poder; en aquel tiempo los sabios/clérigos "magós" solían pertenecer a familias muy adineradas, y el conjunto de todas estas características termina desarrollando para ellos el título de reyes. Como nuestros protagonistas, que arribaron a Belén gracias a que conocían el mapa del cielo y lo que éste presagiaba, guiados por estas luminarias en el cielo. Se dice en la Biblia que venían de Oriente, pues los dones preciados que portaban para entregar como regalo al recién nacido Jesús de Nazaret, eran oro, incienso y mirra, especias y materias, especialmente las dos últimas, procedentes de Oriente. Y no se dice en ningún momento que fueran tres, sino que tres es el número que se le da oficialmente por tradición porque éste fue el número de regalos que recibió el niño. Tampoco se dicen sus nombres, pero todos sabemos que son Melchor, Gaspar y Baltasar. La primera vez que se descubrió este dato, fue en la iglesia de San Apollinar Nuovo, en Rávena (Italia); en el friso de la misma hay un mosaico del siglo VI que representa la Procesión de las Vírgenes, y esta procesión está guiada por tres personajes que llevan ropajes persas, gorro frigio y manos en actitud de ofrecimiento que van cargadas con cofres para ofrecérselos a la Virgen María, sentada en el trono sosteniendo en su rodilla a su hijo recién nacido. Encima de las cabezas de los personajes, se lee "Gaspar, Melchior, Balthassar..."
Con el tiempo, las leyendas aumentarían, así como la simbología añadiendo más detalles; se les terminaría representando con unas características físicas concretas e incluso se darían posibles lugares de procedencia. Hasta el papa Benedicto XIV, en su obra, "La infancia de Jesús", lanza la teoría de un posible origen español, más concretamente andaluz, como lugar de procedencia de los Reyes Magos, pues debate la posibilidad de que los magos fueran originarios de Tartessos, la actual Doñana, ese triángulo formado por Sevilla, Huelva y Cádiz. Curiosamente, aunque sean populares en medio mundo, especialmente en países de origen latino, es en España donde su fiesta se celebra por todo lo alto, sin faltar religiosamente (aunque no seas religioso ni creyente), todos los años el día 6 de enero.Tal arraigada están sus figuras en España que hasta nuestra primera obra teatral en nuestra lengua y en este país registrada como tal de la que se tiene constancia tiene que ver con ellos. Se los conoce en todos los países cristianos, por sus nombres, aunque la fiesta no celebren igual o con la misma emoción y fastuosidad; en el idioma inglés se les llama "The Three Wise Men" (los tres sabios), se les puede encontrar simplemente como "Three Kings", da igual cómo se les mencione, pero en todo el mundo, se conocen sus nombres y se sabe que eran son Melchor, Gaspar y Baltasar, los Tres Reyes Magos.
Gaspar; del persa "kansbar", significa "administrador del tesoro", por contra a lo que pensemos, a Gaspar se le ha puesto como el primero durante muchos años, y puede tener sentido: por el nombre que tiene es se presume que portaba el oro, regalo que indicaba el linaje real del niño Jesús.
Melchor; nombre hebreo que significa "mi rey es luz", o "rey de la luz". Se presume que portaba el incienso, material que indicaba que el niño recién nacido tenía relación con lo divino, no sólo era un rey, era "hijo de Dios".
Baltasar; del persa "Bel-Sar-Utsor" "Dios protege al Rey", en casi todas las tradiciones es Baltasar quien portaba la mirra, que indicaba la condición mortal del niño, pues estaba anunciado que ese rey que acababa de nacer, moriría sacrificando consigo todos los pecados del mundo para ser resucitado.
Los tres tuvieron una revelación, una manifestación, que en griego se dice epiphanós "epifanía", pues gracias a la estrella por fin encontraron lo que buscaban, al niño que decían era un rey, ¿qué niño iba a ser rey siendo un recién nacido?; muchos niños llegan a ser reyes con el tiempo, pero había uno solo que desde que nació ya era rey, y su llegaba la anunciaban las estrellas.
Y el 6 de enero se celebra su día, el día de la Epifanía, esa manifestación que se dio en el cielo, de lo que tanto andaban buscando.
Aunque el día de la Astrología como disciplina, es el día del equinoccio de primavera, el día del astrólogo, el que lee las estrellas, es el 6 de enero, en honor a estos Melchor, Gaspar, y Baltasar; que ni eran reyes, ni eran magos. Pero son nuestros Tres Reyes Magos.
Eran estrelleros. Y son estrellas, pues si os asomáis por la ventana, en el cielo mirando al este, ahí están los tres, formando Orión, observándonos todo el año, para ver si hemos sido buenos.