La Navidad es ese período del año que quiera uno o no, se termina por celebrar. Gusten o no gusten estas fechas. Hay mil planes, mil formas de festejar, otros no hacen nada en especial, pero una gran mayoría acaba sentándose a una mesa grande con más familiares a celebrar una cena, en unas fiestas de las que siempre se tiene una anécdota, y que cada vez más gente desea que terminen cuanto antes.
Cuando uno es niño se viven con otra ilusión, lo que es la inocencia misma. Antaño existían otros valores, otra forma de ver la vida y otra perspectiva sobre las fiestas del Solsticio de Invierno, lo que vienen a ser en realidad. Se celebraban igualmente grandes cenas, se reunían familias enteras, incluso era de rigor salir a pedir el aguinaldo y los había que daban propinas bien espléndidas a los chiquillos del barrio; es más: habían hasta niños jugando por la calle. Antes la sociedad funcionaba de otra forma; el padre salía a trabajar a su empleo fijo y con su sueldo mantenía a su señora y a una prole en muchos casos numerosa, las madres estaban orientadas al hogar y a la gestión de su familia y lo hacían con incluso vocación y devoción, los chavales esperaban con ilusión estas fiestas, Reyes Magos, regalos, villancicos y aguinaldo, risas y casi tres semanas de vacaciones. Todo el mundo parecía feliz, en la calle había ambientazo hasta en el barrio más alejado de la capital y parecía que la gente llevase una sonrisa en la cara; uno felicitaba el año al vecino, se tomaba una copichuela con el mismo mientras los hijos se enseñaban el uno al otro lo que le habían traído los Reyes Magos.
La gente era sin más, feliz.
Todo eso se ha perdido. Crisis, trabajos basura, contratos precarios, la incertidumbre de no saber qué va a suceder mañana en el trabajo, familiares con los que no te hablas, familias políticas que resultan un tostón y nadie lo disimula. Parejas que están unidas forzosamente por una hipoteca o por los hijos aunque ellos no se aguanten, aquellos que han emigrado y tienen que celebrar las fiestas solos, otros que tienen que estar en una mesa llena de gente que odia y gustaría de estar solo. Planes forzosos, como el salir sí o sí en Nochevieja con los trajes de boda y si no lo haces eres un triste, pues "es la mejor noche del año" (según algunos).
Hoy día es normal escuchar a los demás que odian la Navidad, los hay que se acostarían un 22 de diciembre y desearían ser despertados un 8 de enero. Hablando del día 22 de diciembre, aquí en España sabrán nuestros lectores de allende los mares que se celebra el Sorteo de la Lotería de Navidad, que es un acontecimiento social en el que probablemente esté todo el país o casi todo, involucrado. Pueden haber más participantes jugando a la lotería ese día que personas votando en las Elecciones Generales, y la lotería es otro debate social pues están de nuevo los que compran el décimo aunque ni les guste ni quieran pero no sea que en su trabajo caiga el gordo y sean los tontos del pueblo que no habían comprado; o está el entusiasta con una fe increíble (y poca cabeza probablemente) que se deja un fortunón, está el que lo compra a última hora y al que no le queda otra porque casi que se siente obligado y está el que decide que ni quiere lotería, ni quiere salir en Nochevieja y no tardan en llamarle "amargado".
Porque sí señores y señoras, la Navidad es una fiesta cuanto menos, impuesta socialmente y cada vez con menos espíritu. Pocos, nadie, o casi nadie, rememoran que en la tradición judeocristiana, la base de nuestra cultura, se celebra el nacimiento de Jesús de Nazaret en una fecha adaptada por la primera comunidad cristiana y más tarde la Iglesia Católica para adaptar y fusionar la tradición pagana de la celebración del Solsticio de Invierno, momento en el cual el Sol entra en el signo cardinal de Capricornio y oficialmente en el hemisferio norte comenzamos el invierno y en el hermisferio sur estrenan el verano. Momento en el que se alarga la luz del día y el Sol "nace de nuevo" después de haber muerto en el Solsticio de Verano.
Si el ambiente que se respira es el del estrés y los nervios por unas fechas que parecen para algunos el caos absoluto con esas cenas, obligaciones, cuñados que lo saben todo y te van a dar la cena, reuniones de empresa, este año, más que nunca, prepárense que vienen curvas. La Navidad este año estará ambientada con Mercurio en posición retrógrada, y así despediremos y estrenaremos el año.
¿Qué significa cuando un planeta está retrógrado? Pues es esa fase en la que visualmente, desde la Tierra, pareciera que el planeta va hacia atrás; no se vayan a pensar que el planeta se para y hace la marcha atrás porque eso es físicamente imposible, pero si ustedes gustan de observar con un telescopio o desde un observatorio los movimientos planetarios, es curioso ver cuando un planeta se coloca estacionario y luego retrógrado. ¿Por qué los astrólogos solemos "temer" los períodos de Mercurio retrógrado?, pues bien, Mercurio es el planeta que rige la comunicación, desplazamientos, trayectos cortos, llamadas telefónicas, los vehículos, aparatos eléctricos como tablets,ordenadores, teléfonos móviles, cualquier electrodoméstico, el correo electrónico, las noticias sean buenas o malas, y las conversaciones, así como el tráfico y los atascos, por no hacer aquí la lista entera, que sería interminable. Todo esto tocado por Mercurio en fase retrógrada significa "retraso", paralización, atasco o caída del sistema, caos y estrés.
Cuando Mercurio se pone en fase retrógrada es normal que vengan los malos entendidos, cosas que no se quieren decir y se dicen, se habla más de la cuenta, se mete muchísimo la pata; los teléfonos no funcionan o se caen servidores de internet, es normal que las redes sociales se colapsen y no marchen bien; los atascos son normales así como el tener pequeños golpes con el coche y accidentes de tráfico que no son graves pero no hace falta que se explique lo que supone tener un susto en la carretera aunque lo "único" perjudicado sea el coche; el que alguien diga una cosa que luego resulte ser otra, jaleos; correos electrónicos que no se tenían que haber enviado; retrasos de todo tipo sobre todo en viajes por carretera, tren y avión; se suelen romper muchos aparatos eléctricos, la luz misma se funde, y ahora con las nuevas tecnologías los smartphones y la red definitivamente parecieran manejadas por el diablo.
Durante este período normalmente se recomienda andarse con mucho ojo con las cosas que se comienzan, procuren no comenzar nada importante, ni firmar contratos, ni mudarse, ni llegar a acuerdos firmados, y este año, más que nunca ahora que se nos vienen las Navidades, hagan el favor de tener mucho cuidado a la hora de comprar los regalos. Se pierde mucho la cabeza con esta posición por no hablar de los fallos que pueden presentar los teléfonos móviles u ordenadores; puede parecer exagerado pero comprar algún aparato electrónico en un período de retrogradación es garantía de que se rompa y dure muy poco. La consigna es tener mucha paciencia, aprovechen que el planeta retrogradará en Capricornio que es un signo terrenal y se suele andar con pies de plomo.
En la comunidad astrológica se ha comentado mucho este año la unanimidad que ha habido concerciente a comprar regalos que incluyan teléfonos móviles y ordenadores por ejemplo, así como tablets. Muchos prefieren esperar a que termine el período y librarse de disgustos y de precios desorbitados en estas fechas y cuando llegue el mes que viene encima se adquieren los productos en rebajas. Cuando compren miren los precios, letras pequeñas, garantías y guarden los tickets, será normal que tengan que devolver algo.
Es normal en estos períodos que se pierdan cosas y que luego aparezcan como cosas de brujas, y también es una tradición que gusta mucho de traernos el mensajero de los dioses aquella en la que se tienen noticias de personas de nuestro pasado, sobre todo de las ex parejas. Que tu ex resurja en estos días es algo normal y asumido, y aunque no se le vea físicamente ni te contacte ni te envíe ese Whatsapp "por error", alguien te hablará de esa persona que tú creías enterrada para los restos. Cuiadito con lo que dejan escrito en foros y blogs, cuidadito con lo que hablan con su suegra en la cena de Nochebuena, miren bien lo que compran que a veces lo del 3x2 es mentira, y procuren ante todo ser prudentes al volante y tomar todas las precauciones posibles. En sus comunicaciones diarias, será normal que escriban y no les respondan, y viceversa, se ralentiza absolutamente todo lo correspondiente a la comunicación y la palabra.
Por si no fuera poco es normal que en estos períodos haga más frío, se suelen ver muchas aves en el cielo volando raudas a otros puntos buscando lugares más acogedores mientras pían ferozmente, así como es normal que se cojan muchos resfriados o se padezca de anginas y enfermedades respiratorias, da igual la época del año en la que caiga este fenómeno.
Mercurio rige a Géminis y a Virgo, signos que deben estar muy pendientes porque es su planeta dominante y también los dos mutables más Sagitario y Piscis.
El pasado día 1 diciembre Mercurio se colocó en su posición estacionaria, que es aquella en la que el planeta visualmente, pareciera ir hacia atrás; lo hizo en el grado 28º de Sagitario. A esta fase en al que aún no está retrógrada pero empieza el movimiento hacia atrás, se le suele llamar "zona de sombra".
El día 17 de diciembre se posiciona en el emplazamiento sin aspectos, en Inglés, a esta situación se le denomina OOB (Out of Bonds), sin vínculo; no hay ni conjunciones, ni cuadraturas ni sextiles ni trígonos, el planeta danza solo en el cielo, con la única energía del signo en el que se encuentre en ese momento, en este caso, Capricornio.
El día 19 de diciembre comienza oficialmente el período retrógrado, toda la Navidad de 2016 marcada por la retrogradación; fenómeno que puede incomodar más si cabe unas fiestas en las que cada vez más gente pareciera tener menos espíritu a medida que pasa el tiempo. Lo que es una pena, desde luego.
Les recuerdo que acabamos de vivir una Luna Llena en Géminis signo regido por Mercurio, enfatizando mucho lo que está por venir.
Mercurio se colocará directo el día 27 de enero de 2017 en el grado exacto 15º de Capricornio, conjunto a Plutón, un grado después de aquel 14º el que se colocó directo el 25 de enero de 2016; observen lo que sucedió en esos días del año pasado para ver más o menos con lo que se pueden encontrar en esta nueva retrogradacíón. Al darse la conjunción con Plutón las palabras se vuelven dañinas, muy venenosas, situaciones no concluidas con enemigos, comunicaciones y peleas, tensiones con socios y amigos o parejas. Personas del pasado que resurgen, el ex o la ex o esa persona con la que hay algo inconcluso (no tiene por qué ser necesariamente un asunto amoroso), palabras que no se dijeron en su momento, firmas de contratos que trajeron problemas.
Mercurio retrógrado sí que es recomendable para re-hacer cosas, el prefijo "re-" es importante en este tiempo: revisitar, reformar, re-pintar, re-colocar, restaurar; muy bueno para llevar el coche al taller mecánico a pasar una re-visión, si tienen pensada una reforma en el hogar es ideal, cualquier arreglo en esta temporada es garantía de que el aparato dure muchísimo más porque si no se arregla ya no podrá funcionar jamás aunque se intente arreglar más tarde. Muy bueno para todo aquello que se dejó pendiente se re-haga de una vez y se termine.
No sólo es aplicable para los arreglos de las cosas y aparatos, ustedes pueden re-visarse a sí mismos, pueden re-meditar, pararse (retrogradarse) a observar actitudes, pensar sobre su situación personal, re-flexionar de cara al futuro, re-mendar y arreglar cosas que no les gusten de sus personalidades y tirar adelante, todo aquello que sea re-hacer para mejorar.
Mientras no pierdan la cabeza y actúen con paciencia un período de Mercurio retrógrado no puede suponer males mayores, dependiendo del signo en el que esté, esta vez le ha tocado a Capricornio, que tiene el pequeño inconveniente de tener a Plutón en ese grado. Normalmente los períodos retrógrados son mucho más heavy en signos de aire.
A aquellos que no les gusten estas fechas ármense de paciencia y hagan lo posible por pasarlas en paz y armonía, procuren alegrarse, que suelen ser fechas mágicas; para aquellos desencantados que una vez tuvieron ilusión, nunca es tarde, estamos en unas fechas muy bonitas que están en el último año teñidas por el paso de Saturno en Sagitario, el signo español, y es normal el ambiente plomizo, triste y casi de funeral que se ve últimamente. Párense y reflexionen, ¿por qué la Navidad nos hacía feliz cuando éramos niños?¿acaso creen que era exclusivamente por los regalos?.
No, en Navidad éramos felices porque teníamos esperanza e ilusión, de que aquello que se pedía se hacía con mucha fe porque se tenía la certeza de que nos lo iban a regalar, de que iba a venir. Ustedes dirán que es porque creíamos en una mentira, en realidad es porque teníamos sin más, esperanza e ilusión por el futuro. Sabíamos con total seguridad de que nuestro regalo iba a llegar.
Pueden pararse a re-flexionar y muy probablemente puedan volver re-escribrir su propia historia. Quizás lo que más falta nos hace ahora más que nunca es tener la Fe de que todo a mejor puede cambiar.
Feliz Navidad.
Tengo la impresión de que esa conjunción de Mercurio volviéndose directo con Plutón va a afectar a la economía.
ResponderEliminarMe ha gustado mucho tu "post",sobretodo,por los recuerdos que me ha traído,aunque pienso que a veces,casi es mejor que se queden ahí, en el recuerdo,porque volver a recuperarlos y compararlos con la realidad de nuestros días aún me crea más tristeza.El mundo en estos últimos años,y desde mi punto de vista, se ha vuelto un lugar absurdo,donde nadie encuentra su sitio,donde hemos perdido la conexión con nuestra naturaleza más íntima.Para lo que tenemos ya una cierta edad,es como si nos hubiéramos ido a dormir y al despertar ya no reconociéramos nada,es como,si uno de aquellos regalos que esperábamos en la navidad del pasado,hubiera sido la "caja de Pandora",y,tristemente,la hubiéramos abierto.Feliz Navidad a todos.
ResponderEliminarEstrellero,
ResponderEliminarLa conjunción de Plutón con Mercurio retrógrado provocará retrasos en las nóminas, pagas de Navidad y salarios, sobre todo en estas fechas y más a los empleados temporales y eventuales, también malos entendidos concernientes a las condiciones salariales y casos de explotación.
Cuando Mercurio se coloque directo se acentuará más y podríamos estar hablando de que ya habremos pasado el mes de enero y seguirán las gestiones sobre salarios atrasados. Así como también una mala noticia en referencia a la economía que ha quedado enterrada y saldrá a la luz cuando el planeta se posicione directo.
Anónimo,
Muchas gracias, me alegro que te haya gustado. Estoy de acuerdo, los tiempos han cambiado pero no hay que perder la ilusión como cuando éramos niños, y no ahora en Navidad, sino durante todo año.
La esperanza no se ha de perder nunca.
Un saludo.
¿Qué había en el cielo en aquella época que no está ahora? ¿Qué astros han generado todo este cambio? ¿Cuándo va a parar?
ResponderEliminarFeliz Navidad a tod@s.