Igual que a ese pariente al que no tenemos mucha estima que aparece en las cenas navideñas por sepa usted quién es el que le invita, aparece Mercurio retrógrado para amenizarnos estas próximas navidades a su estilo: con retrasos y atascos en los desplazamientos, jaleo, caos, aparatos que se rompen, comunicaciones que se malinterpretan, ruido, estrés y la maravillosa sensación de "no puedo más, que alguien haga algo".
El año pasado ya tuvimos a Mercurio retrógrado en Navidad, pero fue en Capricornio y este signo asimiló mejor este período. Aquí la cosa se complica porque se inaugura este período el mismo día que tenemos una Luna Llena.
El 3 de diciembre a las 08:34 a.m. (hora española), y habiendo entrado en su fase de sombra del pasado 14 de noviembre, Mercurio se coloca retrógrado en el grado anarético 29º de Sagitario, justo cuando iba a entrar en Capricornio. Qué habrá pasado para que ahora decida darse la vuelta y llegar hasta el grado 13º del arquero para de nuevo, volver hacia adelante el día 22 de diciembre. El recorrido entero de su fin de retrogradación y hasta que se termina el período de sombra será el 10 de enero de 2018, momento en el que habremos salido de la travesura particular de este planeta, que no tiene otra cosa que hacer que elegir ir hacia atrás en plenas fechas.
Como todo en Astrología, suceden las cosas por algo, hasta las malas. Si Mercurio ha decidido darse la vuelta por un signo en el que no está muy a gusto (detrimento) como lo es Sagitario, es porque algo tenemos que terminar, en algo tenemos que pararnos a pensar para arreglar una situación de nuestras vidas. Sagitario es un signo que adora el movimiento, en realidad es la esencia de Mercurio, moverse, pero no encajan muy bien este par de dos. Mercurio retro sobre el mimado Sagitario le provoca ganas de quedarse en su casa, sin ver a nadie, esto es: buscando la soledad más absoluta hasta que aguante el chaparrón. Básicamente será la tónica generalizada a nivel global en el comportamiento humano para estas fechas: el querer desaparecer del mapa por una buena temporada.
Cada vez más gente decide celebrar unas fiestas casi impuestas socialmente a su manera, de forma diferente y que no tiene nada que ver con la tradicional cena en familia con unos pocos parientes rodeando una mesa con marisco y viandas y temas polémicos que siempre saca alguno de ellos a modo de reventar una armonía familiar que no es tal. Viajes lejos de la tierra de origen, hoteles, escapadas, incluso quedarse en casa y alegar que no se tienen ganas, o inventarse excusas variopintas. El caso es que cada vez más gente detesta sentirse obligado a tener que cenar con gente con la que sólo tiene en común los lazos de sangre y nada más. Una imposición. Y si en los últimos tiempos se tiene esta visión navideña de consumo exacerbado (para celebrar el nacimiento de un pobre hombre), y de hacer cosas impuestas, ese sentimiento de mera obligación tediosa cobrará más sentido este año: a Mercurio se le une Saturno nada menos.
Más que nunca, serán las Saturnalias en vez de la Navidad. Regresamos a los tiempos remotos.
Tránsitos Importantes
Saturno conjuntará a Mercurio en plenas fechas y esta conjunción es muy fuerte. El sentimiento restrictivo será notable pero por ahí aparecen Marte y Urano que facilitan mucho las cosas, sobre todo si se tiene Acuario fuerte en la carta. Saturno con Mercurio no casa muy bien porque propicia el pensamiento negativo que induce a la depresión. Si se tienen familiares o amigos con tendencia a sufrir depresión habría que prestarles atención especial porque estas fechas estarán muy sensibles y con facilidad para pensar muchísimo en tiempos que no vuelven y de los que mentalmente no han salido, como en un bucle dentro de sus cabezas. Mucha negatividad en el ambiente, tendencia a pensamientos negativos . Palabras duras y demasiadas críticas que pueden desembocar en peleas. Un error accidental repetitivo (el típico error que se comete por despiste una y otra vez) termina en consecuencias catastróficas.
Asociación con el pasado, se piensa mucho en antepasados y lo que éstos influyeron en nuestras vidas; se usan los recuerdos para resolver problemas familiares. Imaginad que estáis en un momento de introspección pensando en vuestras cosas y en algo que no os gusta de vuestras familias y al pensar en el pasado o en familiares que no están, ahí, aparece la respuesta a ese conflicto del presente.
Empeora considerablemente el uso de los transportes. Si normalmente Mercurio juega muy sucio con esto, esta Navidad será caótica: vuelos, huelgas de pilotos, retrasos, atascos. Trenes que no salen, entradas y salidas a ciudades totalmente congestionadas.
Un trígono de Mercurio a Marte aparece para dar una nota positiva, pues esta posición es muy buena y genera que las personas sean productivas en tiempos record. Elimina muy bien las barreras de Saturno, lo que puede provocar que si se es positivo y con tendencia a no caer en el humor global de malos pensamientos, se puedan derribar las barreras saturnales que aparecerían en el camino. Marte y Urano funcionan aquí como alicientes, una cosa es tener a una familiar o amigo enfermos de depresión y esto es serio, pues necesitan nuestro apoyo, pero otra cosa muy distinta es estar rodeado de gente negativa porque sí, porque son gafes por naturaleza y necesitan llamar la atención. Eso es distinto y Urano junto a Marte incitan a que se busque compañía más positiva para evitar contaminarse del pupas al que todos conocemos que agua la fiesta con su eterna visión catastrofista (y que termina por hacer incluso daño al más optimista).
Gracias a Marte + Urano se abre la mente y se tiene más amplitud de miras. Noticias sorpresa de las que dejan con la boca abierta pero que son reveladoras, aquí entra en juego el sextil entre Urano desde Aries y Mercurio.
Mercurio por si no tenía bastante se pone en cuadratura a Neptuno trayendo la confusión mental, riego de caer en trampas y engaños y ser objeto de intrigas y habladurías, rumores, que alguien meta a otro alguien en líos. Las personas que son por naturaleza chismosas, cotillas, con gusto por esparcir rumores y liantas, deberían ser aparcadas de nuestro lado en este mes de diciembre hasta que entre el Año Nuevo porque estarán on fire con ganas de generar más y más argucias de las suyas.
Estrellas Fijas
Entre Saturno y Mercurio, en el grado 28º de Sagitario, se encuentra Etamin, de color naranja. Es el ojo derecho de nada menos que del Dragón, en la Draco, y su estrella más brillante anaranjada es única para la concentración mental y el pensamiento que necesita un análisis, propia también de mentes inquisitivas. Etamin le da al Dragón del cielo el gusto por la soledad, como si fuera un ermitaño, de ahí que la tradición asegure que es astro propio de monjes, ascetas, escribas, religiosos o personas que necesitan pasar mucho tiempo solos para la concentración mental porque se dedican a escribir o porque necesitan estar solos y alejados.
De ahí que la naturaleza de este período mercurial sea que a la gente a nivel general sienta la necesidad de pasar muchísimo tiempo solas y no por marginación personal, sino por elección propia (una soledad muy distinta a cuando a uno le abandonan). Soledad buscada, retiro voluntario, ganas de estar con uno mismo. Un dato curioso de estas navidades será el bajón considerable de ocio en Nochevieja porque no habrá espíritu de diversión como en otros tiempos de borrachera y espumillones.
Quedarse en casa, incluso solos para los que vivan solos, y hasta aquellos que tengan que trabajar en noches señaladas, el trabajo le puede suponer un remanso de paz. Como si se tratara de una tarde lluviosa de domingo: manta, tv y a disfrutar con uno mismo.
Alwaid en el grado 12º 11 de Sagitario es muy fuerte, tan cerca de Antares, la estrella por excelencia del signo y una de las cuatro reinas de las estrellas fijas (y estrella de España), trae una nota muy distinta. Alwaid según la tradición es algo destructiva, propensa a los accidentes y violencia, inclinación al crimen y también con riesgo de envenenamiento.
Fechas Importantes
-3 de diciembre de 2017: entrada en fase retrógrada de Mercurio y Luna Llena en unas seis horas más tarde.
-5 de diciembre de 2017: Mercurio se coloca en conjunción exacta a Saturno en Sagitario.
-12 de diciembre de 2017: Ras Alhage, estrella fija situada en el tercer ojo de Ofiuco, trae al ambiente la inclinación de que otras personas ajenas a nosotros generen peleas con el fin de que caigamos en la trampa. Huyan, y no entren en provocaciones.
-13 de diciembre de 2017: el día de Santa Lucía, antiguo día escogido para el Solsticio (día de la Luz), el Sol a 21º de Sagitario conjunta a Mercurio en calidad de combusto, lo que implica que las cualidades de Mercurio se ven mermadas. Doble combo si ya de por sí Mercurio retro está fuera de sus cabales. Mucha prudencia.
-22 de diciembre de 2017: Mercurio se coloca por fin directo
-10 de enero de 2018: Fin del período retrógrado.
En definitiva el resumen de Mercurio retrógrado como tránsito más importante de cara al último mes del año, es el revisar qué se ha hecho en los últimos dos años y medio en los que Saturno ha estado en Sagitario, signo por el que hará repaso el mensajero del cielo en este mes de diciembre.
Una particularidad de Saturno en Sagitario ha sido el gusto por la soledad, realizar cribas sociales de amistades que no son beneficiosas y quedarse con las que merecen la pena. Esto ha sido más beneficioso para la persona habituada a ser echada para adelante y con coraje (propio de Sagitario) pero para aquellas personas más dependientes e introvertidas, el viaje de Saturno ha sido cuanto menos un total suplicio y se han visto muy solas, incluso abandonadas. Saturno en Sagitario no ha sido nada fácil, pues la naturaleza restrictiva de Saturno acaba con la naturaleza expansiva y muy optimista del arquero, de bondad natural y con amplitud de horizontes.
Se ha dado por un lado la lucha de los que quieren estar solos junto con la lucha de los que se niegan, aquí cabe mencionar la oposición de algunas personas a reconocer que en ciertos momentos de la vida, es incluso necesario el estar solo y el saber decir adiós a aquellas personas que ya no pintan nada en nuestra vida y que tienen que recorrer su camino. La soledad es muy necesaria a veces.
Y este es el tema de este período mercurial: aprender a estar solos o el querer estarlo a toda costa como particular autoterapia personal. Una forma diferente de pasar las fiestas: con uno mismo. Dependiendo de la cultura de cada lugar del mundo, se puede hacer con más o menos facilidad, porque la tradición navideña casi a nivel mundial en los países cristianos es reunirse con la familia se quiera o no. Este año habrá atrevimiento a no acudir a algunas de las celebraciones y los habrá atrevidos, que por fin digan "quiero estar solo".
Sin olvidar las trastadas propias de Mercurio marcha atrás: reencuentros con personas del pasado, ex parejas que aparecen a la vuelta de la esquina, contactos con personas que parecieron haber sido abducidas, pérdida de objetos o encuentro de los mismos; rotura de electrodomésticos, cables que se funden, atascos mastodónticos, vuelos que no salen, trenes que no llegan nunca. En la oficina e-mails que se envían mal o no se envían, jaleos en citas importantes, malos entendidos. Muchísimo cuidado este año especialmente en los viajes.
Hasta que pase la tormenta y se Mercurio se ponga directo, ésa será la naturaleza: las ganas de desaparecer por una buena temporada.
Cuando regreséis de vuestro retiro, os espero en las Estrellas.
PD: mientras se escriben estas líneas hoy 24 de noviembre de 2017, se cumplen 26 años de la muerte de un grandísimo Mercurio, nada menos que Freddie Mercury. Ojalá Mercurio fuera más Freddie y menos retrógrado.
Lectio Stellae
¡¡¡Ojala!!!...Oír su dúo con Monserrat Caballé es un lujo para los sentidos. Muchas gracias, Lectio Stellae, por tan interesante artículo sobre el evento de Mercurio en la última retroacción del año...¡¡¡2017 ha tenido 4!!!. Esperemos entrar en 2018 con la "criba" bien hecha y aligerados para encarar las nuevas propuestas.
ResponderEliminarUn cariñoso saludo.
Por favor, y cuándo podremos volver a levantar cabeza los Sagitario?? Cuándo volverá todo a ser como antes? Cuándo podremos volver a ser los que éramos?? (Gracias por vuestras entradas, son geniales)
ResponderEliminarMisma pregunta respecto a los géminis, estamos atrapados en una nube negra.
EliminarYo soy asc. y he pasado lo mío, en serio ha sido todo surrealista. No pierdas tu capacidad de encontrar un sentido profundo y trascendental a todo lo que ocurre... yo también lo h ehecho, pero hay que confiar. Se supone que para mediados de mes sale Saturno de Sagitario, así que paciencia, por ese punto negro por donde haya pasado el viejo Chronos, vendrá Zeus a recompensar los esfuerzos, sacrificios, penurias y demás... Y si no, que se lo digan a los escorpio. ¡Animo! ¡Ya no nos queda nada! Saludos
EliminarMisma pregunta para los Aries... los enanos nos crecen!!
ResponderEliminarPedazo de post. Qué gran trabajo. Enhorabuena por el blog y vuestro trabajo, compañeros de foro.
ResponderEliminarYo ya teniendo la conj natal entre mercurio y saturno, todo lo que describes es asi!!!!!!...
ResponderEliminarGracias por el post
Hola a todos:
ResponderEliminarLos Sagitario empezarán a ver la luz a medida que pase el mes de diciembre, que Saturno se irá del signo, por fin (menudos tres últimos años habéis pasado).
El año pasado tuvimos las navidades con Mercurio retro y fueron bastante más tranquilas que lo que muchos se imaginaba. Cuestión de no agobiarse y sobre todo rodearse de personas que son positivas y tranquilas. Las personas nerviosas se vuelven locas con Mercurio en esta fase.
¡¡Haya paz!!
Muchas gracias a todos.
Un saludo.
Casi nadie en la red se dedica a incluir en sus boletines las estrellas fijas y siempre se aprende mucho, son largos y extensos, ¡gracias! Acabo de descubrir a Etamin, que junto a Acumen se encuentra a tan sólo 4º de mi asc. y corrobora una faceta importante de mi personalidad. Saludos.
ResponderEliminar