Estamos en tiempo de tránsitos planetarios que cambian de signo.
En lo que llevamos de año, hemos visto el paso de Saturno a Piscis el día 7 de abril, y el día 23 vivimos el paso de Plutón a Acuario. También vimos el fin del inusualmente largo período de Marte en Géminis, y ahora vamos con el siguiente cambio.
Júpiter abandonó el signo de Aries el día 16 de mayo, para entrar en el signo de Tauro, donde cobra otra dimensión su forma de influir, porque se cambia su naturaleza. Y estará en este signo hasta el 25 de mayo de 2024, todo un año para vivir un nuevo tiempo protagonizado por el planeta rey de los dioses.
Características de Júpiter en Tauro
Se sabe de la legendaria fama benéfica de Júpiter y su patrocinio en los asuntos de la buena suerte son de sobra conocidos. El optimismo, la esperanza, la alegría, amplitud de horizontes, y en general, lo que se condensa dentro de "lo bueno", están atribuidos al planeta más grande de nuestro Sistema Solar, no por menos, se le llama "el gran benéfico".
Pero que Júpiter sea un dechado de virtudes no significa que todo sea bueno, pues tiene su lado no tan bueno, como sucede con todos los planetas, y además, se suele tener en general una idea equivocada con respecto a este planeta.
Cuando se anuncia un tránsito fuerte o importante de Júpiter, empieza a cundir algo muy destacado y típico de la naturaleza jupiterina: el exceso de optimismo y la falta de noción de la realidad. Esto puede ser por las ansias y deseos fuertes de recibir suerte o bendiciones, las ansias de cambios, y muchos caen en el error de pensar que las cosas buenas que este planeta suele repartir caen del cielo de forma automática.
No, no es así, y con Júpiter hay que andarse con cuidado.
Júpiter para empezar es muy exagerado, y el exceso de optimismo que provoca suele venir acompañado de grandes chascos. No ver la realidad con las gafas adecuadas es otro de sus rasgos, o tener aspiraciones demasiado altas sin tener en cuenta los límites. También es un planeta que da demasiada confianza en uno mismo o en las propias posibilidades, sin medir pros y contras y sin tener en cuenta consecuencias.
Es por ello que muchos se sientan decepcionados cuando termina un tránsito de Júpiter, y sientan que no ha pasado nada o que sus sueños no se han cumplido, y esto es, porque a saber qué tipo de sueños se tenían, y en qué habían puesto sus ilusiones.
Júpiter en Aries durante el último año no ha sido para tirar cohetes. En Aries está en caída, una mala posición para este planeta, que además ha resaltado la agresividad, la rabia, y potencia la tensión que las personas guardan en su interior, acumulando la ira contenida para luego, no soltarla o no canalizarla bien. También en Aries ha aumentado el ego, que mezclado con rabia y con un exceso de confianza en la persona que se expresa, hace de las palabras de esa persona unas muy agresivas, con dominio y una autoridad dictatorial; de ahí que a lo largo del último año se hayan visto discursos muy fuertes en política y con una agresividad radical.
Pero ha pasado a Tauro, y aquí Júpiter se relaja bastante. Tauro es de por sí un signo relajado, que detesta los contratiempos y no es muy fan de la energía radical, que ya está teniendo con Urano encima, por lo que encuentra un oasis en sí mismo con la llegada de Júpiter a su terreno.
Y es que Júpiter en Tauro destaca la necesidad de rodearse de cosas buenas y bonitas, y por muy material y comodón que sea Tauro, el perezoso al que le gusta que se lo den todo hecho, no es especialmente el rodearse de lujos o cosas caras de lo que se trata durante este tránsito. Por "cosas buenas y bonitas" se entiende a la necesidad de rodearse de lo que es agradable a uno mismo, sea ver un atardecer, estar en la naturaleza, relajarse en un jardín, comer lo que se desea en ese momento, tomar un helado, entrar en esa pastelería, escuchar esa música o meterse bajo mantas en el sofá a ver tumbados esa película. El buscar estar rodeado de lo bueno que uno valora más, es la esencia básica de este tránsito de Júpiter por el signo de Tauro.
A este planeta se le bautizó como al rey de los dioses no por mera casualidad. El miembro de la realeza Júpiter está asociado al crecimiento, a la expansión, al aumento; a la dignidad en el mandato, al buen juicio, a la sabiduría, a los buenos regentes y buenos gobernantes, es jovial, es alegre, y se vincula con la abundancia. Allá donde va Júpiter aparece la fortuna, y también se incrementa algo, porque sube de volumen los lugares por donde pasa. Esto puede ser bueno o malo, porque si Júpiter pone la lupa en un lugar, es porque ahí hay que prestar atención, ya que algo se está convirtiendo en "demasiado" y esa mano ancha que se ha levantado sobre ese asunto, debe recibir una dosis de medida. Por eso es un planeta que también se vincula a las exageraciones.
Tauro, es el signo que ama lo material, le encanta el dinero, el lujo, esto no tiene por qué ser mal visto, ya que a nadie le amarga un dulce, y darse caprichos de vez en cuando está genial. Es el signo de la biosfera, la naturaleza, de los jardines, de la Tierra, nuestro planeta y nuestra casa; el signo que está asociado a la propiedad inmobiliaria, a los bienes inmuebles y raíces, el terreno, el campo, la agricultura y los cultivos.
A lo largo de este año que tenemos por delante, estos serán los temas que serán más comentados, o que más protagonismo tengan, y se pondrá mucha atención a todo lo que tenga que ver con la naturaleza, con el planeta, aunque esto ya lo estamos viendo desde hace un tiempo más reciente (con noticias que si ya son mentira o verdad, es otra cosa). Pero el caso es que el foco de atención se centra en ello, no por menos llevamos un tiempo con el mantra del cambio climático, que parece ser la nueva moda, y por ahí irán los tiros en el próximo año. Si ya hemos visto la propaganda política y hasta con personajes del entretenimiento haciendo su campaña del "cambio climático", esto parece ser sólo el principio. Una cosa es preocuparse por nuestra casa, por el planeta y la naturaleza, por la conservación de la flora y la fauna, y otra ya es darle una dimensión exagerada al tema que ahora llaman "cambio climático", con un discurso de exageración y no exento de manipulación. Y sólo hemos visto el principio, que nos queda un año por delante con respecto a a este tema.
Pero como la naturaleza de Júpiter en Tauro es la de no complicarse mucho, su influencia puede hacer que ante cualquier tema repetitivo, cansino, complicación que surge del debate y del discurso, se produzca un rechazo, porque la mente influenciada por Júpiter en Tauro, no quiere que le carguen mucho, y su afán de estar de relax apartados de la discordia o de la discusión, o de todo lo que sea muy machacón, van a hacer que el toro sin más, se aparte, se vaya a su pradera a pasar el tiempo sin molestias, porque sólo quiere paz mientras está rodeado de lo bueno.
Va a ser lo contrario a la energía del último año, que en vez de ser agresivo, lo que hará será rechazar la agresividad, y allá donde antes podía haber un tumulto de gente enfadada, el toro se va al prado a pasar su tiempo en la naturaleza, o los "toros" humanos, preferirán irse a relajarse al bar, a la heladería, al parque, a estar rodeado de la energía positiva, en las "praderas" del ocio humano que están en el entorno urbanita.
La tradición astrológica asocia el tiempo de Júpiter en Tauro con incremento del dinero; hay más oportunidades generales de obtener dinero, y si hay algunos influenciados bajo el colocón jupiterino de optimismo y desenfreno, que sepan que esas oportunidades pueden ser sin más, las del trabajo, por si alguno se piensa que esto se traduce como que le va a tocar la lotería y creencias similares. Es más simple, Tauro es práctico y simple, y las oportunidades en el terrenal prado de Tauro con Júpiter se traducen en trabajos, aumentos de sueldo, obtener un dinero que le deben a uno, ayudas merecidas, todo dentro del pragmatismo. ¿Que puede tocar la lotería?, claro, porque se aumenta la oportunidad de obtener dinero, pero mejor no poner las esperanzas y sueños en este tipo de golpes de suerte que aunque existen, corresponden a una probabilidad muy alta para que den resultado.
Por eso hay que tener mucho cuidado con las inversiones, esos lugares donde se pone el dinero, en qué se invierte, y en qué se gasta. Mirar mucho los gastos y también tener cuidado con la sobre indulgencia comprando caprichos sin tener en cuenta el agujero que se puede producir en la cuenta bancaria.
Esa sobre indulgencia de darse caprichos puede jugar una mala pasada, ya que no sólo se refiere esto como algo vinculado al dinero, sino a cuando uno se alimenta. Comer muchos dulces o comer demasiado porque "me lo merezco", si tenemos en cuenta lo poco amigo del deporte que es Tauro, puede provocar el aumento de peso y también posible aumento de casos de diabetes. A Tauro le gusta mucho el buen comer y el buen beber, y darse los caprichos con el dulce. Cuidar las enfermedades del estómago y sobre todo la boca, la laringe, porque Júpiter, ahí donde le veis, es un planeta que suele ir vinculado a la enfermedad del cáncer, y especialmente con esta posición, al cáncer de boca, laringe, faringe y lengua, también el cáncer de garganta; con respecto a esto, esperemos no tener que leer o saber sobre estos casos.
Esto es en referencia a la influencia física en la materia, porque Tauro es el cuerpo físico, pero también hay una influencia en el espíritu, y es que no se habla de Júpiter como el planeta de mayor nivel espiritual que hay. Esta faceta de Júpiter es desconocida, y es precisamente, donde había que apostillar más.
Cuando se relaciona Júpiter con la felicidad, se puede tener la idea errónea de imaginarse una felicidad como si fuera la euforia, la explosión de alegría, risas exageradas, todo es de color de rosa...no es así. La felicidad a la que hace referencia Júpiter se trata de una más interesante, y es de aquella que va acompañada de la plenitud, de esa sensación de estar bien con uno mismo y con el entorno, el bienestar, sentirse en paz, tener tranquilidad en la mente, ese estado en el que uno se siente pleno y colmado con la vida, en cuanto al ánimo. El espíritu, el alma, se siente BIEN, y está en perfecta conexión con el mundo, la naturaleza y con Dios. Ahí radica la famosa felicidad que trae Júpiter, y no una fiesta eufórica donde todo es felicidad y arco iris.
El crecimiento espiritual es la tarea que siempre viene acompañada de los mandatos de Júpiter, incluido en Tauro, un signo que parece indiferente a estos temas, pero tiene buena disposición para los asuntos que surgen de la corazonada, que no hay que desdeñar. El crecimiento es interior, y la conexión con lo divino también viene acompañado en la compañía de la naturaleza. Sentirnos felices será posible si tenemos un equilibrio entre nosotros mismos, nuestro entorno, y la conexión con la providencia, a la vez que tenemos las necesidades cubiertas, en la medida de lo posible; no es tener lujos a nuestro alcance, sino tener las necesidades cubiertas, y eso basta. Tauro es un signo telúrico, siente muchísimo las energías físicas, anticipándose a algo que va a pasar, no en el sentido intuitivo de Piscis, o la chispa adivinatoria de Acuario, sino porque está notando precisamente en la materia, en el mundo físico, que algo pasa que no se ve. Como cuando los animales predicen los terremotos con días de antelación, que empiezan a comportarse de forma extraña, este es Tauro recibiendo a Júpiter, prediciendo eventos según el terreno, con muy buen olfato.
Si no ponemos atención a los asuntos del alma, por mucho que tengamos la nevera llena o los mejores artículos en nuestra casa, no nos va a servir de nada absolutamente para sentirnos plenos. Así es como se alcanza esa plenitud de la espiritualidad cuando se trata de Tauro. A otros signos más espirituales como Sagitario o Piscis les bastan otras más trascendentales para empezar a conectarse con la esencia divina, de hecho no necesitan la materia para experimentar eso, pero Tauro, tiene una misión. El signo que tiene disposición a acumular, a conservar mucho las cosas, o a aferrarse a ellas porque si no no se siente seguro, aprende esta vez con Júpiter que su felicidad va a depender mucho del valor que le da a las cosas, más bien, aprendiendo a no sobrevalorarlas y a aprender a quedarse con lo esencial, con lo que es conveniente y útil, con lo bueno de verdad, y no con lo que él podría considerar qué es lo bueno. Muchos pueden asociar la felicidad al coche último modelo, otros a tener la mejor casa o las mejores vacaciones, pero no se trata de esto, se trata de darle valor a aquellas cosas de la vida que de verdad, tienen el valor más significativo. Puedes tener la mejor casa o el mejor coche, pero puedes estar muy solo o sola, porque no tienes amigos con quiénes disfrutar del tiempo, por poner un ejemplo; a lo mejor valoras más tener el coche más caro del mercado, cuando lo que más feliz te haría sería pasar la tarde tomando una cerveza con unos cuantos amigos, tan simple como eso. Se trata de valorar lo esencial de la vida, que no es precisamente lo material. La idea de desapegarse puede ser dura para Tauro, pero Júpiter quiere enseñarnos eso, que se puede ser feliz con lo más sencillo.
Para el año 2024, se producirá un evento astrológico bastante importante que dará mucho que hablar, porque se trata de la conjunción que realizará Júpiter con Urano en los grados 21º y 22 de Tauro, tránsito que tendrá lugar desde el 18 hasta el 26 de abril. Ahí aparece un tiempo de mucha sorpresa, que viene con grandes pérdidas o grandes aumentos, situaciones que por ejemplo irán a repercutir en las bolsas, la economía, las inversiones, y muchos pueden perder dinero pero otros pueden ganarlo. Situaciones imprevistas que aparecen como sorpresas tremendas; oportunidades interesantes pero también shocks que dejan a uno con la boca abierta. Hay un gran significado de "liberación" en esta conjunción, y se pueden ver "rupturas" que involucran empresas, bancos, comercios, firmas de grandes compañías, contratos que se rompen sin aviso y causando un gran revuelo. A nivel inmobiliario aparecen montañas rusas en los precios de la vivienda, y lo que parecía estable e inamovible, se cae a pedazos de golpe, se produce la "sacudida", como si aquello que no pudiera poder romperse, diera la campanada.
Todavía queda para ello, e iremos ampliando la información.
Con Júpiter en Tauro se aprecia mucho lo tradicional, lo clásico y hasta lo conservador; lo que siempre ha estado ahí, esa tradición inamovible, que por mucho que el mundo avance al son de eso que llaman "progreso", esa tradición e identificación con lo que es de uno, con la tierra, la cultura, llama de forma fuerte como cuando dicen eso de "la sangre tira". Vuelta al valor de las tradiciones, de lo añejo, de lo que ha sido "de toda la vida", regreso a valorar lo que es la esencia de cada uno, y como conjunto social, de lo que es la tradición de nuestra sociedad, que es realmente, aquello que perdura. La vuelta al campo, a valorar el campo, el trabajo del campo, el pueblo, la patria chica, incremento de hecho, de amor por la patria de cada cual. Se valora más lo que es la cultura de cada patria, si bien antes se ignoraba o se pensaba que era algo arcaico o pasado de moda. Aprendemos a amar la cultura que nos corresponde a cada uno según el lugar en el que hayamos nacido, se echa de menos la tierra para los que un día la dejaron. También se valora el esfuerzo y el trabajo, el tesón; el trabajo artesano y tradicional.
Nos quedamos con lo esencial de Júpiter en Tauro, que es el disfrute de las cosas sencillas de la vida, como una buena siesta, un paseo por el parque al atardecer, o simplemente no hacer nada, tumbarse en el prado; comerse ese dulce que está en el escaparate de la pastelería. Ser felices cuesta poco, lo aprenderemos a lo largo de este año, por si todavía los hay que piensan que el último modelo de teléfono movil te va a hacer más feliz, o esa cosa carísima que te acabas de comprar es lo que te va a hacer feliz por el momento, pero eso no es felicidad. Aprenderemos a apreciar y valorar lo que realmente merece la pena, quizás lo hemos tenido ahí todo el tiempo, está ahí y no lo hemos visto o no lo hemos valorado como se merece. En la sencillez de la vida, estará la felicidad, en el gesto sencillo y cotidiano, y cuando uno se da cuenta de esto (porque igual todavía no lo sabías, ya que las cosas de este mundo te tienen atrapado), será cuando venga el hallazgo de la felicidad y su esencia, y ahí es donde está la sensación de plenitud y bienestar, el crecimiento espiritual.
Nos vemos en las Estrellas
Lectio Stellae
Gracias Lectio por tu excelente análisis. Un abrazo.
ResponderEliminarGracias a ti, un abrazo.
Eliminargracias.... se unen en mi casa XII y llega a casa I...
ResponderEliminarInteresante posición. Un abrazo.
EliminarExcelente Lectio.
ResponderEliminarMil gracias
Gracias, un abrazo.
Eliminar¿Qué significa la "Luna Negra" (nueva) de mañana viernes 19?? Justo, al día siguiente, el sábado, Marte ingresará en Leo. Intuitivamente, creo que tendrá que ver con los resultados de las elecciones municipales del próximo 28 de mayo en España (puede haber un vuelco?) y con la los nuevos derroteros que tome la guerra de Ucrania (la situación podrá ir a peor?). Gracias.
ResponderEliminarHola Eleanor, es una luna más intensa, de hecho a pesar de estar en Tauro, el signo exuberante de la primavera, la luna nueva de Tiene un aroma oscuro, como siniestro y tétrico, tal como si estuviéramos en noviembre en una fuerte luna de Escorpio.
EliminarEstá llamada a sí, una transformación en nuestras acciones, y los resultados de las elecciones van por ahí, porque van a marcar el camino de los próximos meses hasta las generales, habiendo alguna sorpresa, como dices, no se descarta un "vuelco".
Un abrazo
Por cierto, la guerra de Ucrania ya apunta a un final. Estaríamos ya viendo los últimos capítulos de la misma.
EliminarAbrazos.
Júpiter y Urano se unen en mi casa 12 (ASC 28-52 Tauro). Desde 2021 llevo una racha que me ha destrozado la vida. Será sanadora esa conjunción?
ResponderEliminarMucho gusto me da leer sobre astrologia de forma lucida, realista e inteligente. Muchas gracias
ResponderEliminar¡Vaya semana movida en la política española! Debacle del partido del presidente Sánchez y adelanto electoral para el 23 de julio. Por favor, Lectio, dinos algo sobre esto cuando puedas. Gracias.
ResponderEliminarMañana domingo 4 de junio, tendremos luna llena en sagitario, llamada "luna de fresa":¿Qué noticias nos trae? ¿Qué pistas nos puedes dar sobre las próximas semanas y los entresijos de la recién anunciada convocatoria electoral en España? Además, soy sagitario: ¿Cómo nos pinta el panorama? ¡Gracias Lectio!
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