Al igual que cada persona tiene un signo y carta astral personal marcada por la fecha y hora de nacimiento, las ciudades, regiones y países también tienen signo y carta zodiacal.
¿Cómo se averigua la fecha y hora de nacimiento de una nación? Parece difícil pero no lo es.
Para calcularlo, los expertos han tomado las cartas de las fundaciones de los países y ciudades, las cartas de proclamación de independencia si el país o ciudad en cuestión han sido colonia de otro país diferente o la ascensión al trono de un monarca determinado.
Si os ponéis a leer en diversos sitios sobre astrología, veréis como la mayoría de astrólogos le adjudica el jovial y alegre signo de Sagitario a España.
Dan por hecho que el arquero es el signo que corresponde a nuestro país. ¿Por qué la unanimidad?.
A lo largo de nuestra rica historia, España ha vivido sucesos decisivos de los cuales se podía tomar una carta para estudiar los datos de la misma, pero dar con la carta astral española no es fácil, aunque no imposible. Muchos astrólogos toman en cuanta los sucesos más modernos, los más actuales, cuando se han proclamado reyes vigentes o cuando comienzan reinados o nuevas presidencias de gobierno.
España tiene mucho más que ofrecer astrológicamente hablando. Nuestra historia es muy ric, milenaria y variada, con hechos realmente importantes. Hay astrólogos que toman como válida la carta de la ascensión al trono de Juan Carlos I de Borbón el 22 de noviembre de 1975.
Como tenemos una historia realmente fructífera e interesante, nosotros vamos a ir más allá, eso sí, sin dejar de lado la carta de la proclamación del rey Borbón pues es muy interesante y reveladora para los eventos más modernos.
Tenemos que tener en cuenta que el país, como tal, nace bajo el reinado de Isabel y Fernando, los Reyes Católicos, que al casarse unifican los reinos de Castilla y Aragón. Pero la fecha de la boda de aquel 18 de octubre de 1469 no valdría porque aún no eran reyes de facto, por lo que vamos a ir más concretamente al momento del nacimiento de España, de esa unificación de Castilla y Aragón cuando la entonces infanta Isabel de Castilla, se proclama reina un 13 de diciembre de 1474 en la ciudad de Segovia tras la muerte de su hermano, el rey Enrique IV de Castilla.
En ese momento mismo es ella la que se convierte en reina, siendo Fernando de Aragón el rey consorte de la reina, pues en Aragón todavía reinaba su padre el rey Juan y aún le quedaba un tiempo para poder proclamarse rey de Aragón como tal.
Castilla, ya había visto cómo la infanta Isabel se había coronado en Segovia aquel frío 13 de diciembre de 1474 , y con él, nace el país tal y como lo conocemos ahora. Y ahí es cuando buena parte de los astrólogos españoles dan por válida al menos, una de las cartas oficiales de España.
No vamos a desgranar, al menos por el momento, el cómo sabemos la hora exacta del nacimiento de esa proclamación de la reina Isabel, aunque se sabe, podéis a las hemerotecas, que se realiza de día, por la tarde no superando el mediodía o en los momentos más aproximados.
Los astrólogos que han estudiado a fondo los tránsitos de de la carta para ver los sucesos posteriores que se han derivado a lo largo de la historia y así poder compararlo con los datos astrológicos, dan como exacta las 13:35 horas de la tarde, hora rectificada.
(en este sitio podéis ver cómo los tránsitos de la carta de la proclamación de Isabel I de Castilla afectan a la carta rádix cuadrando muy bien con los acontecimientos posteriores:
http://www.astrologiamundial.net/2012/08/espana.html)
La carta de la proclamación de Isabel I es realmente interesante, y revelaría muchos detalles del carácter de nuestra nación. Así como detalle, comentar, que efectivamente, el Sol está en el signo de Sagitario, el signo que siempre nos ha acompañado por tradición. Muy marcado en la casa 8 de las transformaciones, que tanto hemos vivido a lo largo de nuestra historia. Un Sol muy cerquita del Centro Galáctico (lo divino), conjunto a Mercurio (combusto y en exilio) y haciendo trino al AC.
La combustión con Mercurio merma las cualidades del planeta "quemándolo", por lo que bien podría indicar nuestra particular verborrea, esa forma que tenemos de hablar a gritos que ya se ha convertido en una seña de identidad. La fanfarronería propia de los españoles podría quedar marcada perfectamente en esa conjunción combusta.
Lo interesante de la carta es el Ascendente a punto de terminar Aries, y llamando a la puerta de Tauro.
Aries ha sido siempre el signo asignado a los conquistadores, enérgicos, pioneros, cabezas de toda invención que se precie y tremendamente impulsivos. Casi en el signo de Tauro no es de extrañar que el toro sea nuestro animal emblemático seña de identidad cultural desde los tiempos de los Tartessos, y las cualidades taurinas que se pueden aplicar a España son la gula, ese gusto por el buen comer, la pereza, el amor por los placeres, las mujeres bellas, el baile, la música y la fiesta (esto último es muy sagitariano también):
Aries ha sido el signo adjudicado a la región de Extramadura, no es por menos, los mayores conquistadores de nuestra Historia nacieron en aquella tierra y fueron los pioneros en la conquista de América: Pizarro, Hernán Cortés, Jorge y Pedro de Alvarado, Núñez de Balboa, Alonso de Mendoza...llegaron al Nuevo Mundo y sus nombres e incluso los nombres de sus pueblos de procedencia sirvieron de nombres para las nuevas ciudades fundadas en las Américas.
Tauro es el signo que le otorgan a la provincia de Huelva y el oriente de Andalucía, por algo de las marismas de Doñana salió la civilización tartésica que extendió por "la piel del toro" la tauromaquia, siendo vigente hoy día.
Por los conquistadores y por el toro nos conocen. Pasaremos a la Historia, entre otras muchas grandes gestas, por el pueblo que descubrió América oficialmente bajo el reinado de precisamente, los Reyes Católicos de Castilla y Aragón, Isabel y Fernando.
Urano en la casa VII de la carta está en toda su exaltación conjunto a Neptuno, implicaría la naturaleza rebelde y dispersa de nuestra personalidad.
La luna en Libra conjunta al DC que es la casa de las relaciones y los enemigos abiertos, también de las asociaciones, está conjunta al Nodo Norte, que vendría a hablar de nuestra naturaleza, a efectos políticos de exteriores, diplomática, neutral y siempre dispuesta a llegar a acuerdos.
España no es amante del conflicto gratuito y esa luna marca perfectamente la tendencia a las negociaciones, diálogos y pacifismo. Muy enfatizado al hacer sextil al Sol sagitariano. Por lo que ahí queda patente nuestra solidaridad para con los demás, una muestra de identidad española cada vez que se da un conflicto en otros países o catástrofes naturales: España siempre suele ser de los primeros países que se vuelcan con las ayudas humanitarias.
El regente de Sagitario se encuentra en el MC, siendo el gran benéfico siempre en la astrología, anda caído en mal aspecto opuesto a Saturno, regente de ese MC exiliado en el signo de Cáncer en la casa IV, que es la casa del origen, las raíces, el hogar y la familia.
A lo largo de nuestra historia, cuántos habrán sido los emigrantes que en épocas de necesidad y escasez como la dictadura o los tiempos presentes que corren, han tenido que marchar a buscar fortuna fuera de nuestras fronteras teniendo que abandonar a la familia, amigos, patria y el hogar.
España es un país de emigrantes, y los españoles fuera de nuestras fronteras están repartidos a lo largo y ancho de todo el globo. Va con nuestra esencia, y ya dicen que "hay un gallego en la Luna...".
Ese ubicación de los gigantes planetarios de Júpiter y Saturno indicaría esas dificultades, haciendo de España un país que ha sufrido y sufre muchas restricciones. Saturno y Júpiter en la mitología eran padre e hijo, funcionando los dos planetas casi al unísono pues siempre suelen trabajar juntos.
Una oposición de los pesos pesados en signos donde no pueden mostrar todo su poder por las malas dignidades se suma a la de Saturno al nodo norte libriano amante del pacifismo y la diplomacia.
La cúspide de la casa 3, que vienen a ser los hermanos, entorno próximo y vecindario, se encuentra en Cáncer cuyo regente es la luna.
Conflictos marcados y fuertes, dentro de nosotros mismos como país, que han hecho que negativamente tengamos como lema que el deporte nacional sea la envidia, y el calificativo de "país cainita" que gusta de ver la caída del prójimo donde sea normal incluso, alegrarse de la desgracia ajena. "Cualidades" que no casan mucho con la solidaridad que solemos mostrar para con el prójimo de fuera, con el extranjero.
Cuando se trata de algún conflicto entre nosotros mismos, nos llevamos sencillamente a patadas.
Ayuda bastante que Júpiter el benéfico, regente del sol esté haciendo trino a Plutón en Virgo y eso sea una ayuda muy buena para las transformaciones. Ya lo decía Otto von BismärcK
"Estoy firmemente convencido de que España es el país más fuerte que conozco: lleva siglos queriendo destruirse a sí misma y aún no lo ha conseguido".
Muy significativo Quirón, la herida que no cura, ubicado en la casa XI en el signo de Acuario. Heridas en las libertades, herida en la libertad de expresión y en la lucha por los derechos.
Si nos ponemos a dar un repaso a nuestra historia, sobre todo de la era contemporánea, ese Quirón es bastante acertado. No siempre tiene que tener una vista negativa pues tradicionalmente se dice que Quirón es una herida que sana o puede sanar; haciendo sextil al AC de la carta puede impulsar esa lucha por la libertad a ser una nación que no se queda quieta, y que puede dar a gente realmente brava y luchadora por sus derechos y libertades.
Como podéis ver, la carta de la proclamación de Isabel I como reina de Castilla habla muchísimo de nosotros como país, de nuestra personalidad y de nuestra historia.
Como se venía diciendo más arriba, casi todos los astrólogos modernos indican que España es Sagitario, en esta entrada os hemos indicado una de las cartas de uno de los hechos más importantes de nuestra historia; con el signo solar ubicado efectivamente en el signo de Sagitario.
En próximas entregas os iremos contando mucho más sobre la astrología de nuestro país.
"Todos estamos en las cloacas, pero algunos estamos mirando a las estrellas".
Oscar Wilde, dramaturgo inglés. (1854-1900).
Nos vemos en las estrellas.